Sellar la primera plaza de grupo en la BCL. El Unicaja afronta mañana el duelo con el Nizhny Novgorod con la intención de borrar el traspié de Dijon. Un partido trampa, ante un equipo ruso ya eliminado, pero con la calidad para dar un susto ante momentos de relajación y confianza. Volver a la senda de la victoria y certificar otro de los objetivos en este comienzo de curso.
Katsikaris ha analizado en la previa los objetivos de los malagueños en este encuentro; con el típico tono serio y sosegado del heleno, pero con una frase que sin duda va a generar debate en torno a Los Guindos: «La exigencia la ponemos nosotros, no vosotros». Contundente, inesperado, y que hace plantearse el porqué de ese mensaje: restarle presión a la plantilla o si quizás son irreales los objetivos que el aficionado cajista exige.
Ha sorprendido ese cierre del griego. No ayuda a la relación equipo-afición, al sonar un poco a autocomplacencia de cómo está el club actualmente: la realidad es que el Unicaja hace unos años estaba en la máxima élite del baloncesto nacional y europeo, y ahora está peleando por estar entre los ocho primeros de la clasificación. Lo mínimo que se puede pedir a este entidad es estar entre los mejores, por historia y presupuesto.
Hay que enmarcar el contexto de esta respuesta, que ha venido a una pregunta de por qué el equipo tiene tantos altibajos. Katsikaris reflexiona su contestación, pero al final parece que trata de desahogarse. Esta ha sido su respuesta completa: «Todos los equipos tienen altibajos. Hemos jugado trece partidos en la Liga Endesa, y teníamos opciones de ganarlos todos. Seguro que nos falta algo porque lo más importante es ganar. Es lo que vale, más allá de jugar buen baloncesto. Durante un partido pueden pasar mil cosas, entonces hay que gestionas las rachas del rival, tus fallos, y otras muchas situaciones. Eso pasa a todos los equipos».
Y finaliza: «Aquí estamos exagerando mucho con nuestro equipo. Sí que hay una exigencia, la ponemos nosotros, no vosotros. La ‘autoexigencia’, que digo yo. Hay situaciones en un partido de baloncesto que hay gestionar: los momentos malos, cómo afrontarlos mejor. Son cosas de defender bien y ejecutar».