La difícil tarea del Unicaja este verano. Se prevé una estación veraniega de movimientos en Los Guindos, y no es para menos. Después de una temporada histórica en el club cajista con la consecución de la BCL y haber sido campéon de la fase regular de la Liga Endesa, muchos integrantes de la plantilla empiezan a tener muchas ‘novias’. Y no es para menos. La plantilla del Unicaja ha firmado una campaña de un nivel altísimo. Dylan Osetkowski se quedó a las puertas de conseguir el MVP del año en la ACB. En la Basketball Champions League, Kendrick Perry fue el mejor jugador de la competición y tuvo su correspondiente plaza en el mejor quinteto junto con David Kravish. Mantener el núclero duro de jugadores y piezas importantes en el esquema de Ibon Navarro parece una odisea.
Es posible que el pasado miércoles viésemos por última vez a varios jugadores del conjunto dirigido por Ibon Navarro. Y es algo lógico. El aterrizaje de Tyson Pérez a Málaga y la más que probable, pero no aún confirmada, llegada de Olek Balcerowski a la capital de la Costa del Sol provocará que el Unicaja se tenga que desprender de piezas importantes. Algunos de ellos por su propia decisión, como sería el caso del californiano. Los rumores acerca de Osetkowski y el interés en la Euroliga no han parado de sonar en los últimos meses. ¿Qué pasará con Will Thomas? ¿Y con Lima? Muchas preguntas que aún no tienen respuesta.
El Unicaja debe darle continuidad al proyecto de Juanma Rodríguez, López Nieto e Ibon Navarro. Los resultados han llegado antes de lo esperado, con lo que se han ganado el derecho de confiar plenamente en su gestión. «El proyecto es bueno que se siga asentando. Firmaríamos todos que la temporada que viene sea como esta», admitía el técnico vitoriano tras la derrota ante UCAM Murcia.
