La charla que lo cambió todo. El Unicaja ha conseguido empatar la eliminatoria tras un 0-2 en contra, dos derrotas consecutivas en el Carpena. Las sensaciones no eran positivas. Y es que remontar una serie en semifinales de la Liga Endesa, con ese resultado, no lo ha logrado nadie en toda la historia de la competición. Sin embargo, los de Ibon Navarro han sido capaces de forzar el quinto partido, que tendrá lugar mañana miércoles en la capital de la Costa del Sol.
Pero, ¿cómo revivió un equipo cuestión de dos días cuando parecía que estaban muertos? Ibon Navarro tiene la respuesta. Según el propio técnico cajista, el vestuario se reunió la noche del viernes al sábado, justo después de llegar a territorio murciano. En la charla solo estaban los jugadores, ni el staff técnico, ni trabajadores del club, ni directiva. Una conjura en toda regla. No sabemos quién llevó la voz cantante, pero eso da igual. El cambio de actitud en la pista se vio reflejado en los siguientes encuentros. «Teníamos a jugadores como Dylan que no se reencontraba, creo que esa conversación entre los jugadores le reactivó», admitía Ibon cuando le preguntaron sobre el cambio de rendimiento en Dylan Osetkowski.
Ahora todo está en manos del Carpena. Han conseguido lo más difícil, empatar la eliminatoria. No será fácil porque UCAM Murcia ha vencido todos sus encuentros fuera de casa en estos Playoff (Valencia y Málaga). Sin embargo, las sensaciones son diferentes. En el Unicaja saben que pueden seguir agrandando su historia con la oportunidad de disputar una nueva final de la Liga Endesa. Al frente ya espera el Real Madrid, que estando dolido por la derrota en la final de la Euroliga, le endosó un 3-0 al Barça de Grimau.