Ibon Navarro comparece en la previa de ese Urbas Fuenlabrada-Unicaja, de mañana. El técnico vaticina que será una «prueba de carácter para el equipo», y que modificar esos «hábitos e incentivar es espíritu competitivo» sirvan para que los cajistas sean capaces de rendir lejos del Carpena.
Una base en la que construir al nuevo Unicaja. «Había algunos aspectos en los que querellamos darle un giro, sobre todo en balance defensivo, agresividad al rebote, y agrandar el campo a la hora de correr. Hubo errores, después de solo tres entrenamientos, pero ya es un material sobre el que trabajar. No es lo mismo decir que estoy hay que hacerlo bien, que no se vea todo lo bien que queremos. No estuvo todo mal, pero creo que tenemos mucho margen defensivo. En el balance defensivo recibimos nueve puntos, yendo arriba a demás. En líneas generales es un buen paso a dónde queremos ir».
«No es una cuestión de querer cambiar muchas cosas, sino de aprovechar todo lo que tiene el equipo. Intentar tapar lo que no hacemos bien y crecer. No sería muy inteligente cambiar todo en seis días, con dos partidos. Hay que aprovechar las cosas buenas que tiene el equipo e intentar arreglar cositas. Las próximas tres semanas nos vendrán muy bien».
Urbas Fuenlabrada. «Es un equipo que esta muy bien hecho, creo que tienen de todo: jugadores habilidosos con las manos, buenos tiradores, penetradores, pivots muy rápidos y que lanzan, muy buen físico en todas las líneas. Bien estructurado, con un nivel de energía y y físico alto, y que nos va a exigir dar nuestro 100% para competir contra ellos; y más en su casa, que tienen un poco más de acierto. Es una prueba exigente para nosotros, pero espero que seamos capaces de dar nuestra mejor y versión y competir contra ellos».
«Es una prueba de carácter para el equipo»
Rendir lejos del Carpena. «Ayer insistimos en mejorar mucho estas cosas que hicimos mal en el primer partido. Hoy ya serás día de hablar de esto, y mañana. No hay mucho tiempo. Ayer hubo gente que no pudo entrenar por problemas físicos. El mejor entrenamiento fue vernos en vídeo y analizar los detalles; y nos vamos a preparar hoy. Más que una cuestión de baloncesto, es una cuestión de hábitos, incentivar el espíritu competitivo del equipo, saber que vamos a un campo muy complicado, con mucho ruido, mucho ambiente y que se genera una gran atmósfera para el conjunto local. Pero es una prueba de carácter para el equipo. Vamos a ver si somos capaces de ir allí y ser sólidos, seguramente no podamos ser brillantes, pero ser sólidos».
Aguantar situaciones de riesgo en la clasificación. «Está claro que cuando empieza la temporada, hay equipos que saben que van a estar abajo y otros, por las expectativas que se generan alrededor, no se ven en ciertas posiciones. Queda mucho. Estamos a los mismos partidos del playoff que del último clasificado. ¿Por qué vamos a mirar hacia abajo? Vamos a intentar mirar para arriba, ser optimistas y creer en el trabajo del equipo, en el talento del equipo, la capacidad. Se trata de dar más de lo que estamos dando, no dar menos».
Ibon Navarro, aún en aprendizaje. «Es más una cuestión de nivel defensivo que ofensivo. El Real Madrid es un equipo que te exige tener mucho volumen en defensa, tener un quinteto no demasiado desequilibrado. Todavía estoy intentando ver cuál es la reacción del equipo ante algunas normas defensivas para tener más claro ciertas rotaciones. No es una cuestión tajante que no puedan estar Axel y Darío juntos, aunque hablamos que nos podía dar problemas contra algunos quintetos del Madrid. Cada partido es distinto».
La adaptación de Ibon Navarro a Málaga. «Tengo súper controlado el camino del hotel al pabellón y vuelta, es lo único que he hecho hasta ahora (risas). Por ahora todo muy bien. Estoy encantado de estar aquí. Me parece que es club fantástico para hacer baloncesto, trabajar en esto. Todos los medios que pueda necesitar un entrenador, están aquí. Es perfecto. Hace falta ahora trabajar, mejorar y ganar».
