El Unicaja está con el agua hasta el cuello. Es la realidad tras la derrota contra Nanterre 92, que deja al cuadro de Los Guindos con un 0-3 en el Top 16 de la Eurocup. Al borde del precipicio en el objetivo número 1 de la temporada. Ante tal contexto, Fotis Katsikaris decidió dar su primera entrevista como técnico cajista en exclusiva para Radio MARCA Málaga, donde ha exclamado que «tenemos que salir del pozo ya». Muchos temas sobre la mesa, con nombres propios y con los pies en el suelo.
¿Cómo ha sido el comienzo del heleno en el banquillo? «Sabía que iba a ser difícil la situación. Es mala de resultados y se nota mucho el factor psicológico. Cuando tienes que jugar partido a partido, creo que afecta mucho. Tienes que tomar decisiones en décimas y ayer en el tercer cuarto estuvimos totalmente desconectados. Tomamos malas decisiones en ataque y esto te afecta muchísimo en defensa. Tengo esa experiencia de llevar equipos a media temporada y estoy convencidísimo de que lo vamos a sacar adelante. Los jugadores son conscientes y hay que reaccionar«, declaró.
«Es una montaña rusa un partido del Unicaja»
¿Cómo se le puede dar la vuelta a la tortilla? Esto responde Katsikaris: «Ojalá hubiesen batutas mágicas o como si fuese la Play Station que, con un botón, lo cambias todo. Después de lo de ayer tenemos que centrarnos en el baloncesto y no en lo demás. He hablado mucho con los jugadores y hay que poner en acción las posibilidades del grupo. No hay otra manera. Son muy buenos profesionales y hay talento, pero nos falta físico. Quiero ver el corazón de cada uno más grande que su cuerpo».
También hizo referencia a la idiosincrasia de su plantilla: «Podemos dar una identidad al equipo. Es muy exterior y hay talento y capacidad de tiro, penetración y generar ataque. Sí que necesitamos más fuerza y buscar el equilibrio en nuestro juego. Somos quienes somos. Tenemos que intentar defender mejor, jugar más duro y tener continuidad en el juego. Es una montaña rusa un partido del Unicaja. Necesitamos consistencia y hay que saber gestionar esos errores para estar en el partido. Tenemos que arreglarlo, porque este equipo tiene talento«.
«A Francis le quiero ayudar, porque lo necesitamos»
¿Cómo están los ánimos de sus jugadores? Una sola victoria en once partidos… «Es difícil gestionarlo. Unos lo llevan peor que otros en el sentido de que quieren, pero no pueden. Las ganas están sin ninguna duda. El estrés les para y esto es lo bonito del baloncesto: hay mil soluciones para salir de esta situación. Creo mucho en el grupo y tienen que apoyarse los unos a los otros. Hay que reaccionar, ya no hay tiempo. Pudimos ganar los dos partidos. Tenemos que estar listos cuando esto te pesa una y otra vez».
Pasando a los nombres propios, un jugador al que le ha afectado la llegada de Katsikaris a Málaga es Francis Alonso, pero el técnico le defendió con uñas y dientes: «Un tirador es pura psicología y Francis es un tirador nato. Su juego sale de su tiro. Hay maneras y maneras para salir y recuperar tu tiro. A Francis le quiero ayudar, porque lo necesitamos. No era para castigarle ni perjudicarle, sino para protegerle. Si no está muy fino, ahora mismo el aro es muy pequeño para él. Al principio de la temporada era una bañera. Hay que buscar la manera de recuperarle. He hablado con él y tiene que empezar a disfrutar otra vez. Él no esperaba jugar tanto y ese factor ayuda mucho a los rivales, ahora les aprietan más. Seguro que se recuperará, porque lo necesitamos«.
«Me preocupa más nosotros que el rival»
Francis Alonso, el más perjudicado; pero, ¿quién es el gran beneficiado? Yannick Nzosa. Estas fueron las palabras del técnico hacia la nueva perla cajista: «Es un jugador del equipo. Me da igual los años que tiene, yo veo un jugador para nosotros. Un jugador de rotación, ni el joven ni la sorpresa. Tiene la misma responsabilidad que los demás. Tiene una gran madurez baloncestística para su edad. Estamos con él y no es nada fácil para un chaval controlar este tipo de emociones. Tiene que centrarse en su evolución, mejorar aspectos en ataque y protegerle en el buen sentido de todo lo de fuera».
El Valencia Basket visitará este domingo el Martín Carpena. Katsikaris analizó al próximo rival: «Cada partido es importante. Hemos visto que Valencia es un equipo muy bueno: completo, armado en todas las posiciones y con talento. Es una oportunidad para dar guerra de verdad. Tenemos que cambiar el chip ya. Podemos tener oportunidades de ganar y me preocupa más nosotros que el rival. Los jugadores tienen que coger confianza».
«Entiendo perfectamente el cabreo de la gente»
La gran lástima de la nueva realidad baloncestística es la falta de público -o, en la situación del Unicaja, un alivio…-. El técnico tuvo elogios hacia la marea verde: «Estuve en la burbuja de Valencia con Gran Canaria y te acostumbras. He ganado aquí y sé cómo es esta afición. Entiendo perfectamente el cabreo de la gente. Está en nuestras manos recuperar ese ánimo con el equipo. Es nuestra obligación. Debemos hacerlo para nuestra afición, está para apoyarnos e incluso para pitarnos. Es una lástima que no podamos tenerlos no solo para nosotros, sino para el baloncesto».
No solo hacia la marea verde, sino también a su nueva casa: «Málaga es una ciudad buenísima. No solo para jugar al baloncesto. He estado aquí de vacaciones con mi mujer y lo pasamos muy bien. Preciosa y me gusta, la gente es muy impulsiva y con sangre, como en Grecia«. Recordando sus raíces y esperando extender las suyas en la ciudad de la Costa del Sol. Fotis Katsikaris ya está aquí y lo ha dejado claro en clave cajista: «Tenemos que salir del pozo ya».