La temporada de Yankuba Sima en BAXI Manresa no ha pasado inadvertida en Liga Endesa, tampoco para el Unicaja. En el Nou Congost suspiran por su continuidad, y más en el caso que continúe Pedro Martínez, arquitecto del proyecto, aún por ver. Muchos clubes necesitados miran de reojo todo lo que deje escapar el subcampeón de la BCL, el equipo de moda en esta temporada. El Unicaja quiere pescar en río revuelto y ha puesto sus ojos en el pívot (2.11 m, 25 años). Habrá que pelear eso sí con varios miuras del baloncesto español, esperanzados de poder hacerse con uno de los jugadores más codiciados de este mercado.
Tal y como apunta La Opinión de Málaga, en Los Guindos ya han tenido acercamientos con su entorno para aterrice en Málaga. El propio Yankuba Sima ve con buenos ojos esa opción por diversos factores: el Unicaja le va a asegurar un gran papel en la rotación, de primer espada en la posición de pívot. A sus casi 26 años, el catalán sería una de las referencias de los verdes. Otro aval con el que cuenta el club malagueño es Ibon Navarro y su filosofía; además que en la entidad son conscientes que el vitoriano sacaría todo el partido a las características de Sima. En esa revolución, los verdes buscan al menos dos pívots de un perfil físico, duro y resolutivo en ambos lados de la pista.
Añade además este medio que Sima también ha recibido la llamada de Valencia Basket, Iberostar Tenerife y Gran Canaria. Tres equipos que están varios escalones por encima del Unicaja, pero que en el caso de que Sima se decante por uno de ellos, el protagonismo sería inferior al que tendría en la Costa del Sol. El club malagueño tiene motivos para ser optimista.
Ha promediado esta temporada en Liga Endesa 7,4 puntos; 4 rebotes y 8,3 de valoración. El Unicaja ha sufrido en sus propias carnes lo que es capaz de aportar Yankuba Sima: en el Nou Congost hizo 11 puntos y 16 de valoración; mientras que en el Carpena se fue hasta los 12 tantos y 20 de valoración. En BCL, medias similares: 6 puntos y 4,8 rebotes.
En el caso de llevarse el gato al agua, el Unicaja daría un salto cualitativo en su pintura. No es un jugador muy dotado técnicamente, pero es un pívot que da una energía de la que han carecido los cajistas en las últimas temporadas, fundamental para el baloncesto actual. No es una operación sencilla, pero sí factible en el caso que Unicaja sepa jugar sus cartas en una puja que será intensa.
