El equipo reacciona tras la vuelta de vestuarios y ofrece su mejor versión. Carlos Suárez y Alberto Díaz iniciaron el cambio desde la defensa y los malagueños también se agarraron al excelente porcentaje en tiros de tres. Los de Fotis Katsikaris que acaban con un 15/26 en triples. Brizuela, Bouteille y Alonso, máximos artilleros en una noche plácida para los de Fotis Katsikaris. El equipo malagueño, que se mostró por fin sólido, constante y duro, está a un triunfo de certificar el pase a la siguiente fase de la Basketball Champions League.
No fue malo el arranque de partido para los amantes del baloncesto. Eso sí, en el Carpena había poca intensidad defensiva por parte de los dos equipos. El Unicaja se volcó en el perímetro y no le iba nada mal. Gran acierto exterior de Brizuela y de Bouteille desde más allá del 6,75. Los de Fotis cogían la primera renta (9-4), pero Dijon reaccionó. Buenos minutos de Loum y Henry. Ni Eric ni Barreiro eran capaces de frenar al exjugador de Zaragoza. Tras un mate de Kelly se ponían por delante en el luminoso (14-15). Nuevo partido. Cambios en la pista y primeros minutos de Jaime Fernández y posteriormente de Carlos Suárez. Mientras tanto, el Unicaja seguía volcando su juego en correr y lanzar. Jaime anotaba casi sobre la bocina y dejaba a los malagueños uno abajo (21-22).
Apretó los dientes el equipo malagueño en el segundo periodo. Eso sí, de nuevo el juego exterior seguía sacando la mejor versión del Unicaja. A esa fiesta se unió el ‘Gran Capitán’ Carlos Suárez. Dos triples consecutivos y otro posterior de Francis Alonso dejaba a los de Fotis Katsikaris con la máxima renta del partido (32-27). Un parcial de 11-5 que obligaba a Dijon a reaccionar, pero los franceses no aprovecharon la mini torrija cajista. El partido entró en una fase más imprecisa y los malagueños no veían aro. Además, Dijon dominaba más el rebote y le daba segunda opciones. El cuadro andaluz pasó más de tres minutos sin anotar canasta hasta una bandeja en contragolpe de Francis Alonso (36-29). Jugadores a vestuarios.
El Unicaja aceleró y destrozó a su rival en el tercer cuarto. Zarpazo a base de triples. Si en Andorra, el tercer cuarto fue su tumba, con un demoledor 19-0, los malagueños se quitaron las penas a costa de un frágil Dijon. Bouteille y Brizuela volvieron a sacar la artillería. Un parcial casi calcado. Esta vez a favor. Un periodo inmaculado para los malagueños. 26-7 sin respuesta alguna. Coser y cantar. Partido visto para sentencia (55-32). No frenó ni mucho menos la velocidad de crucero. Suárez seguía cazando rebotes y Alonso viendo aro desde el perímetro. Se sumó a la fiesta Rubén Guerrero con un mate para el póster. Último cuarto y todo finiquitado. (62-36)
Cuarto para el fondo de armario cajista. Dijon trató de reaccionar tímidamente. La losa mental y el marcador era un auténtico muro. El Unicaja tampoco le dio opción y Fotis Katsikaris buscó a más actores secundarios se unieran a la fiesta. Alberto Díaz anotó su primera canasta (65-40) y Guerrero seguía en pista. Henry seguía haciendo su partido y lideraba la parcela ofensiva de Dijo, pero con poca fe y poco corazón. El pívot malagueño robaba una bola para acabar colgándose del aro tras un costa a costa (73-46). Con todo visto para sentencia, el técnico griego volvió a darle minutos en pista a Nzosa. El pívot andaba perdido estos días por los cantos de sirena de la NBA y lo aprovechó en el parqué. En definitiva, el Unicaja aplastó a Dijon y afianza su liderato. Los malagueños, a una victoria de registrar matemáticamente su billete a la siguiente fase (83-54)