Empieza a no ser casualidad la poca relevancia que tiene Jonathan Barreiro en este Unicaja, rezagado en la rotación de Ibon Navarro, al menos de momento. Chirrían los solo tres minutos que disputó ante el Real Madrid, más aún el tiempo en pista del gallego ayer en Fontajau: solo setenta segundos. El coruñés, sin problemas físicos que consten, tendrá que esperar para volver a entrar en los planes del técnico cajista. No hay minutos para todos. Veremos si es algo momentáneo porque Barreiro es un gran activo en Los Guindos, y todavía se confía en que termine de explotar en Málaga.
La buena versión que está dando el perímetro verde, en la parcela defensiva concretamente, quizás ha sido el acicate para prescindir del gallego. Pero es que todavía, en los siete partidos oficiales que acumula el Unicaja, no se le ha visto con una participación activa en pista. De los ocho minutos que jugó en Vitoria, hasta solo uno en Girona. Llama la atención, y más cuando este equipo, una de las identidades, es tener un reparto generoso con los doce jugadores de la primera plantilla. Will Thomas fue el segundo menos utilizado ante los de Aíto y rozó los ocho minutos; el resto por encima de diez.
Jugadores como Djedovic, Kalinoski o Ejim han pasado a Barreiro por la derecha en la rotación, es una realidad; como también lo volátil que son los roles en un equipo de baloncesto, más en este Unicaja. El ex de Casademont Zaragoza necesita una buena actuación para engancharse. El jugador no obstante se encuentra tranquilo con la situación. Junto a Will Thomas precisamente los dos únicos jugadores que aún no han despuntado en casi un mes de competición. No es casualidad que estén casi al margen.
Mientras tanto, el Unicaja tiene por delante una semana con dos compromisos; por lo que no sería descartable ver reajustes en lo que ha sido la rotación hasta ahora. Van a ser partidos para dirimir si es algo coyuntural, o realmente Barreiro va a tener que trabajárselo para convencer de nuevo a Ibon Navarro; uno de sus padres baloncestísticos por cierto. La admiración es mutua entre ambos.