Las aguas bajan revueltas en un Cartagena en crisis, rival del Málaga este próximo fin de semana. El conjunto murciano acumula seis jornadas sin conocer la victoria y tiene una crisis abierta que amenaza con llevarse por delante al entrenador Borja Jiménez. La última derrota contra el Espanyol ha puesto entre la espada y la pared al técnico de los blanquinegros. Los recién ascendidos no consiguen el triunfo desde el pasado mes de octubre, cuando ganaron al colista Albacete por tres goles a uno jugando como locales. Seis jornadas sin sumar de tres con alguna dolorosa derrota por el camino. Especialmente dolorosas fueron las derrotas ante Castellón y Logroñés, equipos de un nivel similar. También hizo daño la derrota por 4-1 ante el Mirandés.
A pesar de la mala dinámica, el Cartagena sigue fuera del descenso. Los cartageneros tienen tres de renta por encima de un Alcorcón que tiene, eso sí, dos partidos menos que el rival blanquiazul. La tensión se puede mascar entre los aficionados del ‘efesé’. Ya son una mayoría de aficionados los que piden que se den acontecimientos tajantes que engloban al banquillo. Pidiendo soluciones que sean efectivas para arreglar la situación interna que hay en vestuarios. Y el problema que hay de entendimiento entre jugadores y entrenador, señalan hoy los compañeros de marca.com.
El cuerpo técnico cuenta con la plena confianza de la directiva, una confianza que quema ya a los seguidores del club y que están mostrando por redes sociales. Y una cosa está clara, Borja se está librando porque los estadios están vacíos, y no puede sentir la presión presencial de una afición que insta a solucionar la situación. El Málaga intentará aprovechar que las aguas bajan revueltas en un Cartagena que está en crisis.
