El Málaga puede respirar un poquito más. Los blanquiazules, a falta del Girona – Zaragoza que no afecta a la zona baja de la tabla, disfrutan del primer colchón de puntos desde que arrancó de nuevo la competición. Con su empate en Vallecas, el Málaga ya tiene cuatro puntos de ventaja con respecto al descenso. Los de Pellicer alcanzan la cifra de 45 puntos, un número que incluso otros años ha valido para conseguir la permanencia. Valen como ejemplo la temporada pasada o el curso 2014-2015. Por desgracia para los de Martiricos, esta campaña harán falta más. Aún así, el Málaga disfruta de su primer colchón tras el confinamiento.
Desde que se inició la desescalada, el Málaga no gozaba de una renta superior a un partido. Los blanquiazules comenzaron perdiendo contra el Huesca y empatando a cero en Tenerife. Dos jornadas en la que el descenso, con el Dépor como equipo límite, estuvo a dos puntos de diferencia. En la jornada la distancia no aumentó ni se disminuyó tras el mal empate en casa ante el Extremadura. La siguiente jornada, y pese a un nuevo empate, los malacitanos se colocaron a tres puntos de ventaja con respecto a la zona maldita de la clasificación. La victoria ante el Girona, primera en el regreso del fútbol, no sirvió irónicamente para aumentar la renta, que se quedó en tres.
Con el empate de ayer en Vallecas y la derrota del Numancia en Lugo el Málaga ha conseguido crear su primer colchón. Las cuentas de la lechera dicen que el Málaga estaría salvado si alcanza la cifra de 50 puntos. A los de Pellicer les valdría pues con empatar los cinco partidos que faltan para que LaLiga SmartBank finalice. Nadie quiere hacer números públicamente, pero en el vestuario y en la oficina del cuerpo técnico la calculadora y la revisión de calendario es algo que se hace a diario.