Raquel González encontró una nueva pasión hace ya ocho años. La calistenia. Un deporte minoritario en el que se mezcla un sistema de entrenamiento con ejercicios físicos que se realizan con el propio peso corporal. Sin ayuda real. Tu herramienta es el cuerpo. Este fin de semana, esta malagueña, enfermera de profesión, se convirtió en subcampeona de España en las dos modalidades que compitió en Alhaurín el Grande.
Un deporte minoritario y de ‘bajo’ coste…
A día de hoy es prácticamente imposible vivir de la calistenia. Lo tienes que compaginar con un trabajo y es verdad que hay algunos deportistas que tienen patrocinadores y algunas marcan que apoyan la calistenia.
Imagino que eso de decir que te dedicas a la calistenia… ¿la gente lo conoce?
Cuando empecé solo tenía un referente femenino. Solo había una chica que entrenase calistenia. De hecho era raro que una chica entrenase dominadas.. Me preguntaban si estaba entrenando para ser policía… Era raro, ¿entrenas calis qué? Ahora ya sí es un deporte más conocido.
Un fin de semana especial
De las otras cuatro vigentes, yo me presenté a dos. Me clasifiqué para la final y acabé segunda. Sin ningún tipo de pronóstico. Es verdad que pensaba que no iba ni a llegar a la final, pero mira.. A veces hay magia. Fui a darlo todo, lo disfruté muchísimo y llegó. No soy nada competitiva, pero quería darle mucha más visibilidad a la parte femenina.
Una mujer pionera en Málaga, pero cada vez más mujeres lo practican…
Es verdad que ya hay más chicas que entrenan, que compiten y se clasifican…Yo quería estar ahí y ya llegar a la final fue un sueño. Intento darle mucha difusión a través de mi canal de Instagram. No subo casi nada de mi vida personal. Me gusta subir el contenido porque se ha creado una comunidad muy interesante. Somos muchas de cada punta de España y al final nos apoyamos entre todas.
Se nace con las cualidades, o hay que depurar la técnica…
Según a quien le hagas la pregunta. A lo largo de mi vida siempre he sido una persona muy nerviosa. He practicado varios deportes. Hasta que no conocí esto con 28 años, no me enganché de verdad. Lo mismo otra persona ya nace con esas características. Hay niños con 12 años que ya se les ve la técnica…
Subcampeona de España, ¿y ahora?
Ya te digo no me gusta competir. Soy bastante vergonzosa. A mi lo que me gusta es el entrenar. Competí el sábado, el domingo y el lunes ya estaba entrenando. Si se me da la motivación y me apetece competir fuera, lo haré. No es mi objetivo. No entreno para competir.
La experiencia ha sido increíble. Estoy en una nube, pero prepararse para una competición nacional o internacional tiene un sacrificio mental… Muy importante. En mi caso me lo tomé muy en serio. Tengo miedo escénico, tuve que hacer mucho trabajo. Los ejercicios se hacerlos en los entrenamientos, pero luego lo tienes que exponer. Te mira todo el mundo. Después tienes que cuidar mucho los detalles. No puedes coger peso. Es un lastre. Un kilo arriba o abajo, son 3 segundos más en estático. He llegado a controlar todo eso en ese campeonato. En otros no he podido y la ‘he liado’. Me puse nerviosa, no hice bien la ronda, no controlé bien los estáticos. Es un esfuerzo muy grande.