@RadioMarcaMLG | Pueden parecer pocas 2 victorias en 10 encuentros, pero salvo sorpresa mayúscula el próximo sábado (habrá que ver los resultados de los rivales directos) el equipo llegará al parón de diciembre dependiendo de sí mismo para mantener la categoría. El parón por competiciones internacionales no coincide con el termino de la primera vuelta, para eso tendremos que esperar al mes de enero, donde además hay tres enfrentamientos claves para el equipo, las salidas a Granollers y Porriño, y la visita en casa del Adesal Córdoba. Estos tres encuentros sí darán por concluida la primera vuelta y según los resultados obtenidos se podrán sacar mejores conclusiones.
El hecho es que en el encuentro de ayer ante el Bera Bera vasco poco se pudo hacer. La manida frase “no es un partido de nuestra liga”, que tan poco gusta usar a algunos entrenadores, anoche se hizo más realidad que nunca. Las vascas, inmersas ya en competición internacional, tienen un bloque a años luz de las malagueñas, al menos a día de hoy, tanto en el plano físico como técnico. Son un equipo con más recorrido y experiencia y eso se pudo ver ayer en el parqué de Carranque.
En los minutos iniciales las guerreras malagueñas plantaron cara y con un buen despliegue físico consiguieron igualar las fuerzas a las del todopoderoso Bera Bera, que pasados 20 minutos de juego no pudieron romper el partido. Pero entonces llegarían esos minutos fatídicos para el Clínicas Rincón Málaga Costa del Sol. Los últimos instantes de la primera mitad se están convirtiendo en el principal obstáculo del equipo de Diego Carrasco, quien por cierto cumplió ayer su segundo y último partido de sanción. El acelerón de las de Eli Pinedo, muy buen partido el suyo, llevó a las vascas a un cómodo 9-18 al descanso.
Los segundos 30 minutos fueron más de lo mismo, un quiero y no puedo, pese a que el partido de las malagueñas no fuese malo. La superioridad del Bera Bera fue haciendo mella y las distancias en el marcador se fueron haciendo mayores. Patricia Elorza, Eli Pinedo, María Nuñez o la portera Ana Temprano eran duras rivales con amplia experiencia en este tipo de batallas.
Las dirigidas por Jesús Gallardo “Suso” no se achicaron, si bien es cierto que Jennifer Gutiérrez mantuvo el nivel que le ha llevado a ser una de las máximas goleadoras de la competición. Las gemelas Sole y Espe estuvieron rápidas y batalladoras, como la siempre combativa Pepa Moreno. El caso es que el equipo en general hizo lo que a estas alturas de competición pudo ante un rival superior. Este grupo tiene aún margen de mejora, las jugadoras lo saben y el calendario a partir de enero pondrá a cada equipo en su sitio. Ahora toca descansar hasta el próximo lunes, día en el que se retoman los entrenamientos.