Málaga está de moda. La capital de la Costa del Sol ya albergó la Copa del Rey de baloncesto en febrero y pocos días después de la fútbol sala, ambas en el Carpena. Tenía además previsto organizar la final de la Copa de la Reina en fútbol y en balonmano en el año en el que la ciudad era capital europea del deporte. Un hito que seguirá rigiendo seis meses del próximo 2021. Málaga será la sede, entre el 23 y el 30 de junio, de la fase final de la Liga Nacional de Fútbol Sala. La cosa no queda ahí, la habitual pista del Unicaja también acogerá play off de ascenso a la máxima categoría, en los que se jugará el ascenso el UMA Antequera.
Que Málaga ya esté en la fase 3 ha sido clave para la decisión final. El puzle del final de temporada en la Primera división de fútbol sala ha encontrado por fin una solución después de un mes casi a la deriva. La RFEF ha optado por esta opción para poner punto y final a una temporada abrupta como en la mayoría de los deportes. Faltaba el OK del Consejo Superior de Deportes para otorgar el permiso excepcional, algo que tuvo lugar en el día de ayer. Entre los clubes había malestar ante la posibilidad de los problemas con los contratos. De esta manera, se evitarán los problemas contractuales de los jugadores que finalizan contrato el 30 de junio. De esta manera, Málaga y el Carpena será la sede del fútbol sala en España.
