La portería del CD UMA Antequera ya tiene sus vacantes ocupadas en la vuelta a Primera División. Conejo, un portero con experiencia y una calidad bastante atesorada a lo largo de su trayectoria, contará de nuevo con dos compañeros de presente y futuro que no paran de crecer. Tanto Juanqui como Yiyo han aprovechado la oportunidad de ganarse poco a poco un hueco en el primer equipo y tener la posibilidad de acceder por la puerta grande a la élite nacional en la próxima campaña 2020/2021. Estas dos jóvenes joyas de la cantera seguirán puliéndose en el filial de Tercera División ‘CD UMA Los Olivos’ a las órdenes de Crispi y entrenarán a diario bajo el mando de Manuel Luiggi Carrasco “Moli” y su cuerpo técnico con la posibilidad de tener el premio de entrar en la convocatoria del partido del fin de semana.
Juanqui persigue una segunda oportunidad
Juan Carlos Torres Fernández, a pesar de su juventud, ya ha tenido su alternativa en Primera División. En el curso 2018/2019, coincidiendo con una lesión de Conejo, disputó la segunda parte de un choque en casa ante el Levante UD FS. El ascenso del pasado 29 de junio en el Palacio de los Deportes Martín Carpena le permite regresar al primer escalón del fútbol sala nacional. “El ascenso lo viví con bastante tensión, porque el partido de la final del play-off sabíamos que no iba a ser nada fácil y que Elche nos iba a poner las cosas muy complicadas e iba a luchar hasta el último segundo para conseguir el mismo objetivo que nosotros. Desde la vuelta a los entrenamientos después del confinamiento, el equipo estaba bastante motivado y con muchas ganas de jugar el encuentro. Teníamos muy claro que el reto a cumplir era ascender y no había otro pensamiento. Volvimos en buena forma física, mejor de lo que esperábamos, y todos estos factores han hecho que estemos muy unidos y haya facilitado conseguir el objetivo”, desarrolla.
El joven guardameta malagueño, con un buen bagaje en las categorías inferiores con la Selección Andaluza ganando un Campeonato de España de Selecciones Autonómicas Sub-19, explica lo que supone estar de nuevo entre los mejores. “Este éxito deportivo me ha supuesto vivir la experiencia de lo que es la final de un play-off de ascenso más de cerca, aunque fue un poco extraña al no haber afición ni público. También haberlo vivido desde el banquillo, creo que hacer ver el papel que tienen los jugadores no solo en la pista e incluso aquellos que no pudieron entrar en la convocatoria y estuvieron animando en la grada. Hay que saber asumir ese rol en cada momento y con eso es lo que me quedaría del choque”.
Compartir filial y primer equipo no es una labor fácil y el 28 ha sabido interpretar a la perfección su papel. “Me quedo con la experiencia que han ido ganando mis compañeros del filial y yo, porque favorece mucho nuestro progreso como jugadores y el ir teniendo minutos nos ayuda bastante y nos beneficia no solo a nosotros individualmente, sino también al filial que es nuestro equipo y esperamos que al primer equipo en un futuro muy próximo”. Juanqui, asimismo, indica el discurrir del filial. “Hemos tenido una Liga bastante competitiva en Tercera. Hemos plantado cara a todos los equipos y hemos sabido competir en todos los partidos, aunque nos queda mucho camino por recorrer todavía y se puede mejorar esta temporada, esperemos que así sea, en la que hemos terminado en la mitad de la tabla y seguir progresando poco a poco”.
Uno de los encargados de entrenar a diario con Conejo y aumentar la competitividad en la portería universitaria define cuáles son las metas a cumplir sobre el 40×20 cuando vuelva a rodar el balón. “Como deseo para la próxima temporada, con el filial conseguir el ascenso a Segunda B o, por lo menos, mejorar la clasificación que hemos obtenido este año y quedar arriba en la tabla e ir creciendo. Con respecto al primer equipo, individualmente ojalá poder volver a tener minutos en algún encuentro, pero principalmente el objetivo del equipo es lograr la permanencia sea como sea. Después de tres ascensos hay cada vez más ganas de intentar mantener la categoría y esperamos obtenerla para continuar en Primera División”, remarca el canterano.
Yiyo asciende al escalafón más alto
Alberto Morillo Contreras “Yiyo” (Málaga – 17/09/1999) no detiene su proyección bajo los palos y se propone continuar evolucionando en el club de su tierra. En la recién acabada temporada 2019/2020, Moli le otorgó el premio del debut en Segunda División ante Irefrank Elche CF –el rival de la final del play-off exprés– en el Argüelles y, más tarde, cuajó una gran actuación en un partido clave a domicilio ante el filial de ElPozo Murcia. Una vez disfrutado de estos momentos únicos para un joven jugador y colocar su rúbrica en un ascenso, se prepara para dar un salto más. “El ascenso a Primera lo viví con muchísima alegría, emoción y una felicidad increíble cuando ya el árbitro pitó el final. Antes de eso, unos nervios importantes. Este éxito ha supuesto para mí vivir una experiencia única que nunca voy a olvidar y, sobre todo, junto a este equipo que es como una familia”, pormenoriza el 13.
No pasa desapercibida para Moli la cantera y en Yiyo ha encontrado a un cancerbero que completa a las otros dos con los que cuenta en su plantilla. Alternar filial y primer equipo le permite jugar asiduidad para continuar con su crecimiento deportivo. “La valoración de la temporada solo puede ser buena, aunque se hayan pasado mejores y peores momentos. Se ha conseguido el objetivo principal del ascenso a Primera que hubiésemos firmado todos al principio. Personalmente ha sido un año muy bonito y perfecto para ir aprendiendo por las oportunidades que he tenido de jugar en Segunda y por todo lo vivido. Por otro lado, la experiencia en Tercera con el filial en una Liga complicada y dura siendo nosotros un grupo de chicos jóvenes”.
Yiyo, al margen de su satisfacción por continuar ligado a un proyecto ilusionante, muestra que tiene claro lo que debe aportar al grupo en el día a día tanto al CD UMA Antequera como al filial del que continúa teniendo ficha. “El principal deseo y objetivo del equipo claramente sería mantenernos en una Liga tan competitiva y dura como la Primera División que es la mejor del mundo. No será fácil, pero se trabajará para ello. El reto personal mío es seguir trabajando, aprendiendo y aportar mi granito de arena siempre que pueda y sea necesario, mientras que con el filial también trabajar mucho e intentar, al igual que con el primer equipo, hacer una buena temporada”.