El Barça ha revalidado título, el quinto de su historia imponiendo su experiencia y calidad frente a las ilusiones y esperanzas del debutante Viña Albali Valdepeñas cuyo desempeño en la competición supone ya un título en sí mismo.
Superando sus importantes bajas por lesión, el triunfo azulgrana se ha ido fraguando paso a paso después de un comienzo eléctrico de los manchegos en un duelo con quintetos repetidos respecto a los de semifinales.
El guardameta Edu arrancaba su exhibición durante los primeros compases sacando un balón imposible a Ximbinha, mientras que Buitre avisaba a la contra como preludio de la jugada a balón parado que iba a suponer el gol de Chino con el que los valdepeñeros soñaban aún más fuerte con la hazaña.
Era entonces cuando el Barça sacaba sus hechuras de campeón con Marcenio rematando al poste antes del intermedio. Luego, la reanudación iba a decantar la balanza de la finalísima con la pócima ganadora escondida en la pizarra de Andreu Plaza.
El técnico gerundense sacaba rédito en sendas acciones a balón parado culminadas por los internacionales españoles Adolfo -MVP de la final- y Aicardo.
Valdepeñas acusaba el golpe aumentado con un nuevo tanto, obra de Boyis. La última reacción manchega con diana incluida de Boyis la frenaba el tanto del brasileño Marcenio que enviaba el trofeo por correo urgente hacia Can Barça, mientras el vinatero Chino se hacía con el título de máximo goleador del torneo con la diana que cerraba el choque.