La eficacia de Wanapix Sala 10 Zaragoza marcó la diferencia en un gran partido realizado por la formación de José Antonio Borrego “Tete” que exhibió de nuevo su identidad competitiva en un escenario hostil.
Cabeza alta y a seguir hacia delante con ilusión, ganas y compromiso. El ascenso directo a Primera División se lo quedó Wanapix Sala 10 Zaragoza, pero el CD UMA Antequera demostró que es capaz de reponerse a la adversidad, competir con orgullo y defender un plan de partido con el que incomodó muchísimos minutos a un rival en una dinámica arrolladora de resultados. Plantó cara, no se rindió y lo intentó hasta el final. La eficacia del equipo de Jorge Palos dictó sentencia y propició un marcador demasiado abultado de 7-2 que no hizo justicia al esfuerzo realizado por los de José Antonio Borrego “Tete”. Hicieron lo más difícil. Remontaron un tanto encajado en la primera jugada y le dieron la vuelta al marcador, pero no pudieron ampliar la ventaja y se le escapó la victoria cuando arriesgó y fue valiente. Aplaudir el rendimiento y recurrir al trabajo como fórmula para encontrar el éxito en lo que queda por venir.
El envite no empezó de la mejor manera posible. El conjunto local domina a la perfección las acciones a balón parado, en ellas ha basado su gran racha de 12 jornadas sin perder, y en la primera la enchufó. Adri Rivera conectó una volea letal (1-1). Nada pudo hacer Conejo. Un golpe demasiado pronto que se encajó y, con el paso de los minutos, el plantel verde sacó su carácter competitivo y se hizo con el control de la posesión para acercarse a la portería defendida por Iván Bernad. Colocó una mano firme en un potente derechazo de Miguel y le realizó varias paradas a Burrito. Este último tuvo la ocasión más clara. Sacó a relucir su talento en área rival.
Bajó una pelota, tumbó a su defensor con una finta y superó al guardameta con una sutil vaselina que se marchó rozando la base del palo. Una pena que no acabara en gol.
No se pusieron nerviosos los pupilos de Tete con la desventaja en el marcador. Tuvieron la paciencia necesaria para esperar su momento que llegó en el minuto 7. Nando fusiló la escuadra con un zurdazo a la media vuelta (1-1). El pívot malagueño levantó la autoestima de sus compañeros con un golazo. El empate aportó esa confianza para seguir al pie de la letra el plan de partido diseñado por el entrenador. Una falta sirvió para culminar la remontada. Miguel habilitó dentro del área a Alvarito y el cierre madrileño puso el esférico pegado al palo evitando el despeje del portero (1-2). Leandrinho pudo ampliar el electrónico en un mano a mano en el que Iván Bernad salió vencedor. De una remontada que pudo ser asombrosa en un escenario hostil, un error desencadenó el 2-2 de Pablo Ibarra.
Conejo hizo un par de intervenciones claves en un lanzamiento de falta de Adri Ortego y en un ajustado remate de Tomás Pescio. Las faltas fueron un condicionante mayúsculo en el tramo final del primer tiempo. Las cinco acumulativas obligó a Tete a recurrir al ataque de cinco con portero-jugador para bajar las revoluciones del choque y recurrir a nuevas vías para romper la defensa local. Las primeras circulaciones fueron muy buenas. El balón fue de un lado a otro con criterio hasta que se produjeron dos finalizaciones. Un tiro de Burrito por encima del larguero y otro de Alvarito al poste. El buen hacer y el juego de alto nivel no fue suficiente para paliar la efectividad de la formación de Jorge Palos que anotó el 3-2 y 4-2 a puerta vacía. Dianas anotadas por Adrián Rivera y Adri Ortego.
Un castigo excesivo que volvió a encajar el conjunto antequerano con entereza. Tete y Crispi analizaron lo ocurrido en el 40×20 con los jugadores y les animaron a seguir luchando e ir a por el partido. El regreso a la cancha fue excelente con un zurdazo de Nando que rozó en un defensor e Iván lo desvió lo justo para impedir el 4-3. Wanapix Sala 10 Zaragoza se dedicó a replegar líneas, mantener el resultado favorable y no expuso en demasía aunque sí tuvo varios lances que no culminó o Conejo se encargó de desbaratarlos. Tete apuró al máximo el juego posicional y lo alternó con la presencia de un pívot de referencia, pero no se produjo el tanto que hubiera ajustado la contienda. A falta de cinco minutos para la conclusión, Carlos García marcó el 5-2 y tocó realizar un último intento a la desesperada con el portero-jugador en ataque. Tampoco funcionó.
Iván Bernad y Óscar Andreu cerraron la cuenta goleadora con el 6-2 y 7-2. El cuadro anfitrión, una vez sonó el silbato de los árbitros, celebró con sus aficionados el ascenso a la máxima categoría del fútbol sala nacional gracias una segunda vuelta del campeonato brillante. El CD UMA Antequera, por su parte, agotó la última bala de volver a Primera División por la vía rápida y le tocará intentar cumplir el objetivo en un play-off. En las dos próximas jornadas, ante Ibiza en el Argüelles el sábado 4 de mayo y con Burela a domicilio el día 11, le tocará asegurar la segunda posición y preparar con garantías la fase clave de la temporada.