@CesarRadioMARCA | El Bm Clínicas Rincón Costa del Sol lo intentó con todas sus fuerzas pero no pudo ni acercarse de lejos al potencial del Rocasa Gran Canaria, que se apuntó una contundente victoria por 25-40.
Durante los primeros quince minutos, las chicas de Diego Carrasco aguantaron el tipo e incluso dominaron el marcador en los primeros compases (5-4 en el minuto 7). En el minuto 14, una expulsión de Estefanía Méndez marcaría el punto de inflexión para que las canarias se escaparan y llegaran al descanso con un cómodo 14-21.
Tras la reanudación, los árbitros quisieron tener su cuota de protagonismo y comenzaron a dar un concierto pésimo en el que las locales fueron las más perjudicadas. Diego Carrasco no aguantó demasiado el robo al que estaba siendo sometido y sus airadas y justificadas protestas le dieron a los colegiados la excusa para expulsarle.
Poca historia tenía ya el encuentro, en el que las canarias hacían lo que querían por calidad y por la permisividad arbitral. Al final, 25-40 y la sensación de que una cosa es equivocarte al arbitrar, que es de humanos, y otra burlarse de tu inferioridad deportiva machacándote y tratándote con prepotencia, que es de malas personas. Y así actuaron los colegiados al final del encuentro cuando las malagueñas protestaron por sus decisiones.
