Épica victoria del Costa del Sol Málaga. El idilio con Illunbe permanece después de una tarde inolvidable en la Plaza de Toros de Donosti. Un lugar con mucho pedigrí para las panteras, que sobre el corazón verde dibujaron otro partido que quedará en los anales de historia. Es la magia de la Copa de la Reina, que te regala estos capítulos increíbles. Es difícil de creer lo que pasó en unos cuartos de final donde las malagueñas se impusieron al Atticgo BM Elche en los penaltis. Se la debía el destino al equipo de Suso Gallardo, en una ciudad donde los siete metros le birlaron un título. Metió Gabriela Bitolo, brillante, y paró Merche Castellanos. Las dos heroínas de un pase impresionante. Este sábado espera el Super Amara Bera Bera a las 19:45 horas por el billete a una nueva final.
Las malagueñas saltaban al ruedo con 10 minutos para ver y ver. Defensa sobresaliente que tenía a las ilicitanas todo ese tiempo sin anotar un gol. No aprovecharon esa primera embestida para hacer más daño y se levantaban de la lona las de Joaquín Rocamora. Del 0-4 se pasaba al 9-8, ya con la cuesta invertida y con el flow cambiado de barrio. Ahora había que aguantar el ciclón Danila So Delgado, que se destapaba en un escenario gigante exhibiendo potencia. La lateral terminaría con 11 tantos. Merche Castellanos y Nicole Morales se alternaban para cerrar sus tres palos. Contenían las panteras, que al descanso se iban con tablas (11-11).
Le faltaba esa marcha extra al Costa del Sol Málaga, que ahora pasaba un bache. Se agarraba a Bitolo, que estaba con la flecha hacia arriba. Lo tenía que parar el técnico porque se escapaba el Atticgo BM Elche (17-15). Eran minutos de supervivencia y se acortaba la rotación. Emergía Espe López con chispa para igualar y era Sole López la que daba mucho oxígeno para voltear (20-21). El duelo estaba precioso, un constante intercambio de golpes. Una partida de ajedrez. Así se llegaba a los segundos finales. Alexandra Do Nascimento anotaba a la contra a falta de 14 segundos y parecía sentenciar. Sacó rápido el equipo malagueño, que encontraba en el otro área a Eli Cesáreo. No le temblaba el pulso y anotaba un gol fundamental (25-25). Primera bala esquivada.
La igualdad conducía a la prórroga, donde ambos disparaban al aire cuando el otro estaba para liquidarlo. Se alternaban las ventajas y las posesiones decisivas para cerrarlo. Los penaltis parecían inevitables y se llegaba con el 29-29. Una oda al balonmano que se decidiría desde los siete metros. Ahí habría que llegar al sexto lanzamiento, donde Gabriela Bitolo y Alexandra do Nascimento volvían a asumir la responsabilidad (ya habían lanzado antes). Sangre helada para la primera línea, que metería 10/10 desde la línea. Primordial. La extremo se encontraría con Merche Castellanos, siempre cuando toca decidir. Epopeya del Costa del Sol Málaga, que no olvidará una tarde para contar. Ahora, este sábado, espera el anfitrión. El premio es otra final para un equipo que continúa escribiendo nuevos capítulos de historia.