No pudo ser. El partido ante el Valladolid dejó una serie de sinsabores a lo largo del encuentro que también se trasladaron fuera del terreno de juego. Una semana más para acometer la renovación de un Roberto que no cumplió los requisitos en el José Zorrilla.
Y no porque él no quisiera. De hecho, tal y como adelantaba Radio MARCA Málaga durante la semana, existía un único requerimiento para que el pontanés alcanzara la tan ansiada renovación: jugar al menos 45 minutos en Pucela.
Resulta inverosímil que no lo consiguiera, pero así es la realidad. Sin Sekou y Chavarría disputando el encuentro, parecía imposible no alcanzar la meta. José Alberto optó por alinear desde el inicio un tridente conformado por Brandon, Paulino y Kevin -este último ya amplió su contrato respondiendo a requisitos similares- que excluía al cordobés de la partida y lo alejaba de disputar los minutos necesarios.
Tan solo disputó 20 de los 45 minutos del segundo tiempo. Ingresó en el 70′ en lugar de Paulino para tratar de dar al Málaga los tres puntos en Zorrilla.
¿Cuál es el problema? Que a Roberto se le acaba el tiempo. Sekou y Chavarría comienzan a estar disponibles, y su tiempo sobre el verde podría peligrar. Su contrato actual especifica que, para producirse la renovación, debe jugar 5 partidos con el primer equipo en los que dispute 45 minutos como mínimo por cada uno.
El reloj se resetea y comienza desde el 00:00. Frente al Zaragoza, tendrá que disputar al menos 45 minutos para poder llegar a la meta. Una semana más para acometer la renovación de un Roberto que quiere tirar de una vez por todas la puerta abajo y consolidarse en el primer equipo.
