Parece que fue ayer cuando el público gritaba y alentaba al conjunto blanquiazul en La Rosaleda. Pero la realidad es que ya hace prácticamente un año desde la última vez que la afición asistió a un encuentro del Málaga. Dentro de un mes, en concreto el próximo 8 de marzo, se cumplirá un año natural. En aquel precedente, era el Zaragoza el rival que visitaba Martiricos. Un gol de Luis Suárez, actual jugador del Granada, valió para regalar los tres puntos al conjunto maño. Nadie se imaginaba aquel día que sería la última vez en el año en ir al templo… Y así fue por culpa del COVID-19.
Por aquel entonces el Zaragoza era segundo clasificado y con aspiraciones firmes de ascender de categoría. Pero tras el parón liguero (duró cuatro meses), los maños cayeron en el intento por subir a Primera División. Asimismo, el Málaga contaba con 38 puntos en 31 jornadas, solo siete puntos más que el actual conjunto blanquiazul y con ocho jornadas de diferencias. De valorar si cabe el rendimiento mostrado por la presente plantilla. Más aún sin una hinchada que suma puntos en la clasificación. Tanto que el cuadro boquerón es de los más afectados de LaLiga SmartBank por este aspecto.
Todavía sin fecha concreta para el regreso del público a los estadios, será especial el siguiente encuentro del Málaga por este mismo motivo. El Zaragoza visitará Martiricos en un partido fundamental en la lucha por la permanencia. Los aragoneses son hoy el equipo que delimita los puestos de descenso con 23 puntos. De ahí la importancia de ganar, ya que la diferencia con los puestos de la zona baja ascendería a 12 puntos.
