«Hay que desearles suerte, porque su suerte será la nuestra». Así arrancaba Manolo Gaspar su discurso de presentación de los cinco últimos fichajes -antes de la oficialización de Esteban Burgos- del Málaga CF en el día de ayer. Dos de ellos sobresalen por encima del resto, y desempeñan una posición crucial en el devenir de un campeonato. Rubén Castro y Fran Sol comienzan a entenderse antes de pisar el verde.
Fue el delantero madrileño quien puso la primera piedra en el camino. Al ser preguntado por esa tarea anotadora que ambos tienen sobre sus espaldas, fue tajante y directo. «Los pocos entrenamientos que llevamos creo que nos estamos complementando bien. Rubén se coloca maravillosamente y tiene un don para el gol. Ese esfuerzo y ese trabajo con goles los puedo dar yo también. Queremos soñar con algo bonito».
Por otro lado, fue sincero cuando fue preguntado por una cifra de tantos. «No sé cuántos daremos, pero espero que si Rubén marca 10 y yo otros 10, sean goles que den puntos. No me sirve de nada marcar un hat-trick si perdemos 3-4. Con esos 20 ya tendríamos 60 puntos, que es lo importante para el equipo».
Un Rubén Castro y un Fran Sol que comienzan a entenderse incluso antes de disputar un partido juntos. Los dos soldados de Pablo Guede respiran hambre e ilusión, y solo tienen el gol como objetivo para ayudar al equipo. Mañana podría ser su primera cita como pareja anotadora ante el Hull City.
Jaja con 20 goles 60 puntos? Que vamos a ganar 1-0 todos los partidos???