Sergio Pellicer ha dado su penúltima rueda de prensa en el Málaga CF. El entrenador malaguista ha hablado de sus últimos días como preparador del cuadro de Martiricos. Días cargados de emoción y nostalgia para el de Nules. “Son mis últimas horas, es la decisión más complicada, no sé si me habré equivocado. Pero tengo la tranquilidad de haberlo dado todo, tanto yo como los que han trabajado conmigo. Hace un año esto era un terremoto a nivel deportivo y social, y ahora hay calma, tiene un mejor futuro y es un paraíso porque el club ha dado un paso adelante. Cuando uno lo da todo, te puedes ir con la cabeza alta, con un sentimiento de pena por un lado, pero sabiendo que lo he dado todo”, explicó Pellicer.
El de Castellón se ha abierto contando algunos detalles de su fiesta de despedida. “He recibido cariño desde el club y de todas las parcelas. Ayer tuvimos una convivencia con el personal de mantenimiento, limpieza… Esa parcela tan importante, los invisibles. Andy, un afincando en La Rosaleda dijo unas palabras que me llegaron al corazón. Esa mano obrera con esa cercanía y esa exigencia hace que haya un sentimiento. Hemos podido disfrutar muy poco de la afición, y esa es la pena que tengo. Ayer tuvimos una comida entre nosotros, y sentir el cariño de toda esa gente y lo que me transmitieron te llena de orgullo y te toca el corazón”, afirmó.
Pellicer no supo con qué momento quedarse. “Me quedo con el día a día. Del año pasado el partido de La Coruña, que fue muy importante, y este año la primera victoria contra el Castellón, con cosas invisibles que nadie sabe. Fue duro, pero nos hizo pensar que sí que se podía, después de Tenerife, con la situación que estaba pasando… Esa victoria nos permitió seguir creyendo. A ver si mañana podemos acabar bien. Me quedo con cada momento, con cada feedback de la gente del club. Cada momento hay que disfrutarlo como el primero y como el último”, finalizó Pellicer en su penúltima rueda de prensa.
