Una vez establecida la mesa de negociación y con el Málaga, por las razones explicadas por el administrador judicial, negándose a retirar el ERE, toca nueva reunión con la AFE. Este lunes está previsto que nuevamente Diego Rivas y Alejandro Fernández, por parte de la Asociación de Jugadores, alguno de los jugadores afectados y el administrador judicial junto a miembros de su equipo de trabajo, vuelvan reunirse en La Rosaleda.
El club blanquiazul no va a cambiar su estrategia, pues consideran que es imprescindible para la viabilidad del mismo que se ejecute. Y, además, que se haga lo antes posible. Tienen que salir 10 jugadores de la manera que sea. Se les ha ofrecido un despido de 20 días por año trabajado. La máxima indemnización la recibiría Juanpi, en el primer equipo desde 2014 y con una ficha muy superior al resto. El resto de finiquitos no pasaría de los 100.000 euros salvo en algún caso.
La AFE, por su parte, debilitada por sus luchas internas, quiere aumentar esas cantidades, puesto que ya sabe que es imposible frenar el expediente.
Si las posturas estén muy distanciadas y el administrador judicial, José María Muñoz, considera que va a ser imposible llegar a un acuerdo, romperá las negociaciones y despedirá a los futbolistas. Será ya en los juzgados, a saber cuándo, donde se impongan las diferentes indemnizaciones. Eso llevaría al Málaga a liberar sus fichas y sus sueldos y así inscribir a nuevos jugadores con sueldos adaptados a la actual situación.
En toco caso, antes del 5 de octubre debe haber quedado resuelto todo. Si no fuera así, el Málaga sería expulsado de la competición por LaLiga, por lo que esta reunión con la AFE se antoja vital.
