Hay heridas que nunca terminan de cicatrizar. Juankar se marchó de Martiricos en septiembre de 2020, al ser incluido en ese ERE, que terminó llevándose por delante a otros efectivos de aquella plantilla, como Adrián o Munir. El madrileño ha concedido una entrevista a la revista ‘Panenka’; y habla de aquel episodio sin paños calientes, uno de los más duros de su carrera profesional.
Así se explica: «Me fui de Málaga bastante jodido, por la situación, porque por una mala gestión del pasado nos vimos perjudicados tanto yo como compañeros míos que tuvimos que buscar trabajo fuera de ahí, pero vine aquí (Grecia) con muchas ganas e ilusión de empezar un nuevo proyecto. Y estoy muy contento. Porque, además, es todo muy parecido a España. Siempre se echa de menos tu país».
El de Boadilla del Monte acaba contrato con el Panathinaikos griego, pero mantiene la idea de «seguir» en una liga que «supera todas las expectativas que puedas tener». A sus 31 años, decidió cambiar de aires y hacerlo en el extranjero, y así será al menos por su parte, pero matiza «que en el fútbol puede pasar siempre de todo».
Juankar salió de ‘La Fábrica’, llegando a jugar cuatro partidos con el Real Madrid de Mourinho. Perteneció al Sporting de Braga un total de seis temporadas, sin llegar a debutar en el conjunto luso. Cesiones en el Real Zaragoza, Betis, Granada y su llegada a Málaga en la temporada 15/16, dos temporadas a préstamo. En 2017, el club de Martiricos se lo queda en propiedad en un intercambio con Ricardo Horta. Un lustro vistiendo la elástica blanquiazul. Aún escuece su salida de la Costa del Sol.
También encadenó varias lesiones seguidas que no le permitían jugar ni tres partidos seguidos. Nos dió buenas tardes de fútbol pero no acabó bien su etapa en el Málaga bajó mucho el nivel.
Gracias por todo Juankar.