Finalizó la pretemporada del Málaga CF con saldo negativo en victorias/derrotas, pero con muchas pruebas realizadas. José Alberto ha manejado su baraja y ha dado minutos a una gran variedad de jugadores. Las piezas del ‘puzzle’ malaguista durante el verano no han sido pocas.
La portería de la incertidumbre:
Durante la mayoría de la pretemporada existió esa incertidumbre en la defensa de los palos del equipo. Con la llegada de Dani Martín no hace sino acrecentarse, aunque en los partidos estivales el amo y señor ha sido Dani Barrio. Junto a él han disputado algunos encuentro Gonzalo y Santos, con un saldo de minutos favorable para el argentino.
El muro defensivo:
A pesar de tener claro en todo momento quiénes iban a ser la pareja de centrales titulares, el míster asturiano también ha hecho probaturas. Moussa y Andrés Caro han disputado muchos minutos. Lo han hecho juntos, además de con los profesionales del primer equipo. Juande y Lombán han sido los indiscutibles hasta la llegada de Mathieu Peybernes. El francés disputó los 90 minutos frente al Tenerife junto a Lombán, y también dejó muy buenas sensaciones. Un último integrante, que ha sido el que menos minutos disputó, entró en escena. Ángel Recio también formó parte de la zaga durante el verano.
En cuanto a los laterales, el único fijo parece ser Javi Jiménez. Hasta que no se haga oficial la llegada de Braian Cufré, el nuevo fichaje del Málaga parece ser el único indiscutible de la zaga defensiva. Cristo también disputó minutos, pero ha salido cedido finalmente a la Real Sociedad B.
En el costado derecho se mantiene como jugador con más minutos Alexander González, a pesar de ser el que peor rendimiento ha dado. Ismael Casas, Álex Benitez y Bilal también han disputado minutos, y dando un buen rendimiento. Finalmente, Antoñito Contreras, que también disputó un rato del encuentro frente al Almería, y Murillo, que lo hizo frente al filial.
La medular más polivalente:
En el centro del campo del Málaga también ha habido muchos minutos para todos. No osbtante, hay varios jugadores que han conseguido claramente su sitio. Es el caso de Escassi, Jozabed, Luis Muñoz e Ismael Gutiérrez. Estos son los motores de la medular, y durante sus minutos han dado un nivel superior al resto. Los acompañaron Benkhemassa, Rafa Rodríguez, Dani Lorenzo y Alberto Quintana, pero con menor trascendencia.
En cuanto a las bandas, el amo y señor de la cal tiene nombre y apellidos: Paulino de la Fuente. El santanderino ha hecho las delicias de la afición, y en el último encuentro levantó los aplausos cada vez que tocaba el balón. Su destreza parece infinita, y su verticalidad lo convierten en el mejor arma del Málaga CF por el momento. Junto a él, un Hicham en época de bonanza, un Jairo de más a menos y un Haitam tocado por una lesión han copado las bandas del equipo principalmente. Otros canteranos como Oso, Julio, Kevin, Larrubia o Issa Fomba también han tenido muchos minutos, pero con menos trascendencia.
Los depredadores del área:
Si bien solamente ha habido un gol entre los tres delanteros del equipo actualmente, sus funciones han sido diversas y muy relevantes. Brandon, fuera de su posición natural, se ha desfondado continuamente. Ayudando en defensa, bajando a recibir, asistiendo, y tratando de fijar a los centrales. El mallorquín ha acusado la falta de altura y poderío físico en el 1 contra 1 con centrales de gran talla, pero ofrece otras muchas cosas.
En lo que a los canteranos se refiere, Roberto y Loren también han tenido muchos minutos. El primero ha ido de menos a más, y ha sido el único ariete con un gol en el verano. El segundo ha tenido una montaña rusa en cuanto a rendimiento. Pelea y lucha, pero todavía le falta experiencia en la categoría para encontrarse su sitio entre los centrales. No obstante su entrega, al igual que la de sus dos compañeros, ha sido inapelable.
Todas estas han sido las piezas del ‘puzzle’ malaguista que ha manejado José Alberto y que tendrá que seguir gestionando durante toda la temporada.