José María Muñoz frena la designación de la empresa escogida para la póliza de crédito de 8,6 millones de euros que iba a dar, o al menos así se prevé, una mayor estabilidad financiera para el futuro reciente del club blanquiazul. El pasado mes de mayo se abrió esta vía y a día de hoy, el tema sigue enquistado.
El administrador dice no a las peticiones y exigencias que RedBird Capital demanda. La empresa norteamericana quería que el préstamo que iba a ofrecer al Málaga CF fuese devuelto en acciones del club. Meses atrás, RedBird Capital adquirió un mínimo paquete de 600 acciones que compró a pequeños accionistas del Málaga CF y empezó a posicionarse.
Con ese movimiento, los norteamericano podrán acudir a la futura ampliación de capital. Ayer mismo, en los micrófonos de Radio Marca Málaga lo comentaba Antonio Aguilera, presidente de los accionistas minoritarios. «Las exigencias de RedBird Capital no han gustado a José María Muñoz y de momento hay problemas contractuales para cerrar la línea de crédito»
La póliza de crédito, en punto muerto
Ese tira y afloja entre el José María y la empresa norteamericana han hecho que la póliza de crédito esté en punto muerto. Desde hace más de un mes están en un constante tira y afloja y finalmente por mor de las exigencias del grupo inversor todo ha acabado en divorcio.
Unas relaciones rotas y que ahora obligará al club a designar otra empresa. No hay que olvidar que un total de cinco empresas mostraron interés en participar en ese ‘concurso’ por lo que sobre la mesa existen otras alternativas.
Es cierto que la propuesta de RedBird Capital era la que mejores condiciones representaba para el club. Ésta fue finalmente la elegida aunque ahora haya sido descartada ante las exigencias del grupo inversor norteamericano.
Este frenazo en seco perjudica directamente en la planificación deportiva. Hasta que no se solvente este tema económico, el club anda justo de fuerzas para culminar el resto de fichajes.
