Uno de los episodios más extraños en fichajes de la historia del Málaga CF es Hachim Mastour, una perla del fútbol marroquí que acabó en juguete roto. 1 de septiembre de 2015. Roque Santa Cruz llega por segunda vez al Málaga CF y lo presentan en la terraza del Málaga Palacio, pero del que realmente se habla en la ciudad es de Hachim Mastour, que aterriza en la Costa del Sol para firmar por los de Martiricos la tarde antes. Lo hace en un vuelo privado y rodeado de un séquito propio de los ‘toys’ de Neymar. Firmaría su contrato esa misma tarde y ahí comenzaría su breve historia como malaguista.
Ahora, muchos años después, el jugador se ha sincerado sobre aquella etapa turbia y triste de su carrera. “He pasado por momentos difíciles, estaba deprimido. He conseguido salir adelante gracias a mi familia, así como a mi fuerza de voluntad y a mi fe. “El mundo del fútbol no es fácil, he sufrido mucho, los clubes y asesores me vieron más como una oportunidad de obtener ganancias que como una oportunidad deportiva con la que hay que tener paciencia”, comentaba el todavía joven jugador. Tiene 25 años ahora y ha vuelto a Marruecos para jugar en el UTS Rabat.
Una carrera complicada. Después de ser desechado por el Milán, pasó por varios equipos. El Lamia Griego, el Reggina en Serie B, y, finalmente, el Carpi en Serie C, la tercera división del fútbol italiano. Aquello ocurrió allá por el año 2021 y desde entonces había estado dos temporadas sin encontrar equipo. El jeque lo trajo engañado a Málaga y sus agentes, unos tipos algo extraños, llegaron a amenazar a los directivos del club para su firma. En La Rosaleda todavía está guardado el vídeo que trajo a Hachim Mastour al Málaga CF. Uno de los fichajes más random de la historia malaguista.
🇲🇦 Hachim Mastour: "Sufrí depresión, sufrí mucho. El mundo del fútbol no es fácil. La atención mediática tras mi llegada a Milán hizo que los asesores me vieran más como una oportunidad de obtener beneficios que como un futbolista joven con el que hay que tener paciencia. Eso… pic.twitter.com/L1F4gJwqu8
— Mercatosphera (@mercatosphera) February 5, 2024
Pues como tantos y tantos fichajes que han llegado en donde las comisiones de los representantes y allegados han sido muy superiores al sueldo del jugador y que a veces no eran ni jugadores de futbol, pero esta mafia existe y existira mientras no cambie el sistema.
Ser un malabarista con la pelota no implica que seas un buen futbolista, a este chico le faltaba todo: presencia, posicionamiento, casta, personalidad, lucha, mentalidad, disparo, velocidad… sólo con clase no vale.