Cerrar la semana de los tres partidos ganando al Éibar, era lo mejor que podía ocurrir tras los empates ante el Real Oviedo y Tenerife. Un triunfo trabajado y sufrido con una afición entregada como testigo y que hacía olvidar el enfado por el paupérrimo encuentro en la isla del jueves pasado. No Hay Mejor Antídoto que la Victoria para olvidar la penosa imagen que el Málaga mostró en la isla, ante un equipo que además de ser farolillo rojo, tiene muchos visos de bajar a Primera Federación de no cambiar la tendencia en la que se encuentra inmerso.
Ante el Éibar, Sergio Pellicer volvió a ser fiel a su estilo, poco brillante pero esta vez efectivo. Todos sabemos que la forma de jugar de este equipo no levanta pasiones, que genera críticas que tildan al técnico malaguista de conservador, pero nadie puede dudar de la lucha, entrega y constancia hasta el final de los partidos de los jugadores con los que cuenta el técnico castellonense. Otro detalle que no debemos olvidar es que, ante uno de los candidatos al ascenso, el Málaga terminó jugando con los ‘niños’. Hay que tenerlos bien puestos (además de saber que no hay para más en la plantilla) para volver a depositar la responsabilidad sobre los hombros de Izan, Antoñito y Aarón. Recordemos que Izan entró al campo obligado por la lesión de Luismi, pero este chaval adquiere veteranía cada minuto que está en el terreno de juego. Cuando más empujaba el Éibar, más aplomo le dio Izan al centro del campo junto a un Manu Molina que exhibió dotes de mando en la medular y que no se arrugó peleando a destajo en defensa (providencial su despeje bajo palos para evitar el empate). De Antoñito y Aarón, poco podemos decir que no hayamos dicho ya en jornadas anteriores. Todos tuvieron un gran protagonismo, y eso que no fueron titulares. Por cierto, Castel que también entró al partido desde el banquillo, desesperó a la grada por su escaso sacrificio defensivo cuando más lo necesitaba el equipo. El madrileño se lo debería hacer ver porque no es la primera vez que le ocurre, y porque su entrada al campo es en lugar de un compañero que lo da todo, me refiero a Dioni, claro está.
Otra gran noticia del partido la deparó David Larrubia. En estos Con Rigor hemos criticado al jugador malagueño porque no lograba desbordar ni tenía protagonismo en el equipo. Por fortuna, esta vez no solo fue el autor del gol que vale una victoria de oro, sino que estuvo más afortunado en el uno contra uno y en las ayudas defensivas. Ojalá sea su punto de inflexión y de crecimiento. Deseo que Kevin tenga más regularidad como en la jugada del gol y no se pierda en filigranas innecesarias, mientras que Dani Lorenzo fue de menos a más. Por cierto, esta vez la defensa mostró más seguridad y su mejor nota es que la portería del ‘Santo’ Herrero acabó imbatida.
Si tuviera que acompañar este Con Rigor con una instantánea del partido, esa sería la que ocurrió nada más sonar el pitido final. La mayoría de los jugadores malaguistas se dejaron caer a saco al césped como demostración del esfuerzo realizado, y, porqué no decirlo, por el alivio que representa volver a ganar en casa después de un mes y medio sin hacerlo. Esta semana el título de ‘rey del empate’ hasta resulta agradable de recordar.
Llega la Copa del Rey donde hay más que perder que ganar, porque como equipo de superior categoría, no cabe pensar en la eliminación ante el Estepona. Es la oportunidad para los que menos juegan de reivindicarse. Después, ya hablaremos del Levante.
José Manuel Velasco
Redactor Onda Cero Málaga
Victoria más que necesaria la del pasado fin de semana. Otro empate habría sido preocupante y una derrota ya ni te cuento, pero el equipo volvió a responder cuando hacía falta para enchufar a la grada una vez más y levantar la moral de la plantilla.
Es una pena que Ramón no vaya a poder estar frente al Estepona, ya que creo que habría sido una oportunidad de oro para coger confianza y rodaje de cara a ser importante en la rotación de mediocentros.
Hay que elogiar la claridad que le dan Luismi y Manu Molina al juego del Málaga, el sacrificio y la lucha constante de Dioni, las paradas de nuestro ‘Santo’, Alfonso Herrero, la calidad de jugadores como Larrubia, Kevin o Dani Lorenzo y el descaro de Izan, Ochoa y Cordero con la edad que tienen. También quiere hacer especial mención a Gabilondo y Dani Sánchez, que venían siendo cuestionados y dieron un gran nivel frente al Eibar. Trabajazo de una plantilla que sigue demostrando semana tras semana que tiene un bloque de futbolistas capaz de competir y de sacar los partidos adelante cuando no se conforma con el empate.
A seguir!!