En un parque de atracciones, los caballitos dan vueltas, suben y bajan. Así van a ser los próximos compromisos a los que se someterá el conjunto de Sergio Pellicer, que viene de seis jornadas consecutivas sin conocer la victoria y no gana en La Rosaleda en clave liguera desde el 22 de octubre. Este carrusel dictará sentencia en cuanto a las aspiraciones de aquí al final del curso respecta. El Málaga se sube al tiovivo.
Los momentos de «subida» vienen con los dos próximos rivales: Alcorcón -el colista- a domicilio y Zaragoza en Martiricos. Ambos viven en la zona baja de la tabla con 20 puntos cada uno y con el agua al cuello. El Málaga tiene que frenar la hemorragia ya y recuperar las sensaciones perdidas en el peor estado de forma boquerón de la temporada –los costasoleños tumbaron a los dos en la primera vuelta: 1-0 y 1-2, respectivamente-.
Y llegará la «bajada» con dos huesos duros de roer. Sporting y Rayo habitan puestos de playoff, por lo que el mejor de los escenarios para los boquerones tiene que llegar una vez superada la barrera de los 30 puntos. Cuatro citas que deben servir para salir del valle caído y dejar en una mala noche la imagen mostrada en casa ante la Ponferradina. Al Málaga le espera todo un tiovivo de emociones.
