Día de resaca del encuentro del Málaga CF, y las sensaciones siguen siendo negativas. Los datos del encuentro de ayer no son nada alentadores, y una de las parcelas más afectadas fue la del centro del campo. El Málaga se queda sin timón, y las lesiones merman una sala de operaciones en horas bajas.
No funcionó nada. En primer lugar, el doble pivote formado por Alberto Escassi y Genaro Rodríguez fue, una vez más, superado por todos los costados. La parcela ofensiva del Burgos fue un dolor de cabeza constante para el paleño y el sevillano, que no pudieron achicar agua en un bote que se hundía lentamente. A su espalda, Pablo Valcarce y Juanma recibían y se giraban sin ningún tipo de miramientos ante la falta de contundencia defensiva del doble pivote. Solamente hubo 1 intercepción por parte de Escassi, al igual que por parte de Genaro. Esta estadística es mucho menor a la que acostumbran, y eso se reflejó en el campo.
En segundo lugar, en cuanto a la función constructiva del equipo, en la que suelen ser muy importantes, tampoco salió nada. Entre los dos, perdieron 25 balones en el centro del campo. Fueron 15 por parte del sevillano y 10 por parte del malagueño. Una asignatura que suspendieron con creces y que acusan las bajas del centro del campo. Así, sin Luis Muñoz, Ramón y Jozabed, las ideas ofensivas de la sala de máquinas escasean, y es un apartado que el Málaga no se puede permitir. En los prolegómenos del encuentro, el Burgos llegaba con la estadística de ser el equipo que más llegadas y remates recibía, pero sin una conexión entre la salida de balón y la delantera, es imposible.
El Málaga se queda sin timón, y necesita de alguien que de un paso adelante para echarse a las espaldas una parcela clave en el desarrollo de los encuentros. Con Escassi apercibido y Genaro a un nivel inferior al que estaba acostumbrando, a José Alberto López le crecen los enanos en la medular.
Está claro que ya nos conocen y saben nuestros puntos débiles.
Nos ganan en táctica y planteamiento de partidos. Pero lo peor es no tener una solución ni un plan B. José Alberto fue la impotencia personificada en Burgos. Esto tiene que cambiar de actitud o de entrenador no hay más. Vergüenza ajena me da .
Que ya nos conocen? como si antes ganásemos partidos fuera jjajajaj
Que el problema es de aCtitud, no lo duda ya nadie. Y la actitud del equipo es competencia del entrenador en un alto porcentaje.
Y si no hay aPtitud en centro campo con las bajas de Luís y Ramón, pues que juegue Dani Lorenzo o Alex Rico, peor no lo van a hacer