Keidi Bare vuelve a La Rosaleda, un sitio donde el mediocentro fue muy querido en los años que estuvo en Málaga. Lo hace en una situación complicada con su Zaragoza. Es la primera vez desde que se marchó que pisará la casa del Málaga con otra camiseta. En la temporada 20-21, cuando tuvo ocasión no lo hizo, no obstante hubiese sido a puerta cerrada por culpa del COVID. El regreso de Keidi Bare a La Rosaleda es extraño porque el mediocentro albanés es uno de los señalados en la crisis del cuadro maño. La jornada anterior jugó casi de mediapunta, un puesto muy raro en el que no le hemos visto nunca.
La historia es que Keidi estaba en la órbita del Málaga este verano. El equipo malaguista llegó incluso a deslizar una posible oferta, pero los números estaban muy lejos de las ofertas que tuvo. El jugador hubiese hecho por venir perdiendo dinero, pero es que el Málaga llegaba a la mitad de lo que ya cobraba en el Espanyol y mucho menos de lo que finalmente pagó el Zaragoza. Con los maños lleva 15 partidos disputados, todos ellos como titular y total de 1180 minutos sin goles de momento.
La salida de Keidi Bare del Málaga dejó 1,8 millones de euros de cantidad fija y casi un millón más gracias al ascenso perico esa temporada y a los más de 50 partidos que disputó con el equipo catalán. Juan Ramón López Muñiz fue el principal valedor de Keidi Bare. El centrocampista llegó de la cantera del Atlético para jugar en el filial, pero antes de que finalizara la primera vuelta ya era un fijo con el equipo malaguista. Con la camiseta boquerona jugó un total de 48 partidos en los que también estuvo a las órdenes de Víctor Sánchez del Amo y el propio Sergio Pellicer. Regreso extraño de Keidi Bare a una Rosaleda que pudo ser su casa de nuevo este verano.