Hay partidos que al aficionado se le quedan grabados por muchos motivos. Un gol espectacular, un resultado abultado tanto a favor como en contra, un ascenso, un descenso o un título… son muchos los motivos. Otros se quedan por un gesto. Cuando Míchel tocó a Valderrama o el día que el Chengue Morales casi manda al otro barrio a Roberto Carlos. Hoy se cumplen siete años de una de las caricias más recordadas por la afición malaguista. Fue Weligton, quien siempre viene a la cabeza en la previa de los partidos contra el Sporting por lo bien que se le daba marcar en El Molinón. El central brasileño bailó con Messi el 24 de septiembre de 2014.
Corría la jornada 5 de LaLiga y el Barça de Luis Enrique visitaba La Rosaleda. Javi Gracia era el entrenador del Málaga y el partido acabó con cero a cero en el marcador. En la vuelta el Málaga ganaría 0-1 con un solitario gol de Juanmi a un FC Barcelona que ese año acabaría ganando el triplete. El partido fue tenso y en un momento del choque el central malaguista no dudó en agarrar por el cuello al que en ese momento era el mejor jugador del mundo. La imagen dio la vuelta al planeta fútbol con la mayoría de los medios posicionándose a favor del astro argentino sin más datos.
Messi y acabó por los suelos lo que provocó una tangana con Piqué. La ‘amistad’ venía de antes. Aquel día Weligton explicó los motivos del encontronazo. “Él vino a buscarme y me llamó hijo de puta“. Años atrás, en 2009, Weligton pisó a Messi en un partido y un año antes, en el curso 2008, fue Messi quien escupió a Duda. Weligton siempre recuerda entre risas estas anécdotas de cuando era jugador y defendía la casaca blanquiazul por encima de todas las cosas.
