Pensar en la visita del Albacete a La Rosaleda es recordar el primer ascenso a Primera del Málaga CF. En mayo del 99, en Bravo, Roteta, De los Santos, Movilla, Catanha, Zárate o Agostinho. Sin embargo, el club de Martiricos ha vivido recientes partidos en casa contra los manchegos. No hace tanto que los dos equipos lucharon codo con codo por subir a Primera. En el Málaga Muñiz en el banquillo, en los blanquillos Ramis. Un partido que la grada de La Rosaleda remontó al Albacete en el curso 2018-2019. Con un doblete de Blanco Leschuk y con un “cantaremos más”, que retumbó por los cuatro costados.
Hoy día, Guede busca lo que se vivió aquella tarde. “Cantaremos más, cantaremos más”, es imposible olvidar como nació ese cántico desde la Grada de Animación y que se acabó trasladando al resto del estadio. Bela, el que pudo ser fichaje del Málaga este verano, había adelantado al Albacete desde los once metros en el minuto 57 del choque. En ese momento, la afición blanquiazul alentó al equipo que fue capaz de remontar el choque en apenas siete minutos de vendaval.
Uno se imagina siendo jugador del Albacete o de cualquier otro equipo de Segunda, acostumbrado a jugar con no más de 10.000 personas en la grada, y es lógico que suceda lo que pasó. Y lo que ocurrió es que hubo miedo, de repente pareciera que La Rosaleda fuese la autentica Bombonera. Eso en Segunda intimida y es un arma que el Málaga busca volver a utilizar a su favor. En el Albacete por cierto, estaba Febas, quien no hace mucho recordaba ese partido como uno de los motivos que le había hecho querer vestir la camiseta boquerona. Un partido que la grada de La Rosaleda remontó al Albacete en el curso 2018-2019.
Yo lo viví en preferencia alta, se me saltan las lágrimas, algún día roteta se merecería una puerta de la rosaleda