Verano de 2020. La pandemia iba camino de su segunda ola y en el Málaga CF solo se hablaba de una palabra que en realidad eran cinco. ERE, Expediente de Regulación de Empleo. La temporada de Segunda iba a arrancar y el equipo malacitano, entrenado por Sergio Pellicer, viajó a Tenerife para disputar la primera jornada de la categoría de plata. Un choque contra los chicharreros del que poco se habló en lo deportivo. El Málaga perdió 2-0 en Tenerife y no tuvo opciones en la isla. La noticia estuvo en el vuelo de vuelta a la capital de la Costa del Sol. El equipo lo contaría meses después, aquella noche se vieron en Segunda B.
Con Ale Benítez de lateral izquierdo, con Benkhemassa titular y con un Tete Morente que días después se marchó traspasado al Elche. Así tuvo que salir Pellicer al Heliodoro. En la segunda parte jugaron Larrubia y Fomba. Dos futbolistas ahora en el olvido del Atlético Malagueño. La convocatoria fue un show. Julio, Mini, Eu, Ramón, Alberto Quintana, Gonzalo tuvieron que viajar con el primer equipo. Los futbolistas incluidos en el ERE, que se hizo oficial días después, no se desplazaron. Adrián González, Pacheco, Juanpi, Boulahroud, Diego González… todos estuvieron al margen.
Pellicer lo confesaría un año después en el micrófono de Radio MARCA Málaga. “La semana de Tenerife a Castellón fue clave. Por todo lo que pasó, me emociono al recordar todo lo que hemos vivido. Lo primero que tiene que hacer un entrenador es entender a sus jugadores. Aquel viaje de vuelta fue duro. Algunos fichajes pensaron que a dónde se habían metido”, decía el de Nules. Aquella noche el Málaga se vio en Segunda B. Ahora, casi dos años después, los blanquiazules vuelven a Tenerife para evitar una catástrofe en una de las semanas más importantes de la historia reciente del club boquerón.