Del 2-0 al 2-2 en diez minutos. Ese puede ser el resumen perfecto del Atlético Malagueño en casa ante el Poli Ejido. Los de Funes y Bravo se dejaron remontar en el tramo final de partido un choque que tuvieron controlado. El empate tira por tierra la buena dinámica de puntos y sensaciones que estaba teniendo el filial malaguista después de su brillante triunfo en Jaén. Dos puntos que vuelan ante un equipo que no ha ganado todavía ni un partido en el grupo IX de la Tercera RFEF. Los blanquiazules. Un mal resultado que a pesar de todo mantiene al Atlético Malagueño en los puestos de play-off de ascenso para final de curso.
Los blanquiazules completaron una buena primera parte. Los goles de Jesús Martín y Adri López encarrilaban un partido sencillo a priori. Los malaguistas tenían bajas, hay que decirlo. A pesar de ello, las ocasiones y el fútbol fueron para el equipo de la Costa del Sol, que incluso pudo ampliar su renta antes del descanso si hubiese tenido algo más de puntería. Nadie se podía esperar el desenlace de los segundos cuarenta y cinco minutos en la Federación Malagueña de Fútbol.
A pesar del control, el Poli. Ejido se fue creciendo. El filial no terminaba de sentenciar y así se llegó al minuto 80 de partido. Quesada primero, en un penalti riguroso, y luego Diego Llorente voltearon la ventaja hasta la igualada. El filial no tuvo tiempo de reaccionar, ya que los cambios realizados se habían hecho con la mentalidad de defender la renta. Un dos a dos que se antoja duro de digerir para los malaguistas tras el resultado al descanso. Al final de los noventa minutos, reparto de puntos que no de sensaciones para el Atlético Malagueño y el Poli Ejido de Almería.