El Málaga ha vuelto al trabajo después de regresar este martes de Madrid y disfrutar de un día de descanso. Los hombres de Pellicer afrontan la última jornada del campeonato con todo el pescado vendido y una visita estéril de un Castellón que ya llega descendido de categoría. El técnico de Nules dividió el equipo en dos grupos. Por un lado trabajaron suavemente los titulares del choque contra el Leganés, mientras que por el otro se ejercitó el grueso del equipo con algo más de intensidad. Una sesión que arrancó a las 10:30 horas en el césped de La Rosaleda y que se prolongó durante algo más de hora y media.
Benkhemassa y Ale Benítez han vuelto al grupo superando ya sus lesiones. Habrá que ver si después de un tiempo en el dique seco, Pellicer puede contar con ellos para la visita del los albinegros a La Rosaleda. El grupo lo formaron 16 profesionales, todos a excepción de Orlando Sá y Mejías. El delantero portugués cumplía hoy 33 años pero no lo ha podido celebrar con el resto de sus compañeros. El plantel lo cerraron los 7 canteranos habituales. Strindholm, Ismael Casas, Cristo, Mini, Julio, Quintana e Hicham fueron los protagonistas en ese aspecto.
En el apartado de lesionados de larga duración destacaron Iván Calero y Pablo Chavarría. El lateral diestro hizo carrera en solitario junto a Manu Gestoso y sigue preparando la recta final de su recuperación. El delantero argentino se quedó en el gimnasio y este verano deberá apretar para llegar lo mejor posible a la vuelta de las vacaciones. Ramón sigue con el hombro inmovilizado y todavía le queda un mes en esta fase de la recuperación. Vuelta al trabajo para el Málaga, la última de esta temporada 2021-2022 y también los últimos días de Pellicer en el cargo.
