La derrota del pasado jueves frente al Mallorca en las Islas Baleares ya está olvidada. El frenético calendario de la Segunda División no permite, tanto en lo bueno como en lo malo, parar a disfrutar o lamentar el resultado. Este lunes, nueva prueba para el Málaga.
Quizás igual o más compleja que la anterior. El Espanyol es líder en solitario de una categoría que se le queda pequeña, al menos en este inicio. Solo una derrota, y por la mínima, cosecha el conjunto catalán. De hecho fue ese el único tanto recibido hasta el momento. A velocidad de crucero, los pericos quieren dejar claro quién será el primer equipo en ascender.
Pero para ello tiene que ganar en los estadios más hostiles de la categoría. En esa lista está, sin duda, La Rosaleda. Martiricos está siendo un filón de lujo para los blanquiazules. De los doce puntos disputados, los de Pellicer obtuvieron ocho, todo ello sin conocer la derrota. Sin embargo, no existe miedo para los visitantes si miran los precedentes.
En las últimas visitas del Espanyol a La Rosaleda, todas ellas en Primera División, en todas ellas se llevaron puntos. La más reciente fue en la temporada 2017/18 con resultado 0-1. Las anteriores fueron 0-1 en la 2016/17, 1-1 en la 2015/16, 0-2 en la 2014/15, 1-2 en la 2013/14 y 0-2 en la 2012/13. Habría que remontarse once años atrás para ver la victoria malaguista. Fue en la 2011/12 con un 2-1. Los tantos lo hicieron Rondón y Apoño.