No dio la impresión de que fuese un encuentro de la primera vuelta de la Liga 123 sino más bien uno de los envites del play off por el ascenso. La dureza empleada por los ?e Álvaro Cervera durante todo el encuentro fue permitida por un colegiado que se ganó a pulso el descenso la temporada pasada. Visto lo visto anoche será complicado que regrese pronto a la Liga Santander.
El Cádiz CF planteó un encuentro duro y rocoso pero enfrente estaba el conjunto de Juan Ramón Muñiz que rara vez rehusa a la pelea en este tipo de partidos y esta vez no iba a ser menos. El Málaga CF no se arrugó nunca ante la potencia de un rival que peleó hasta la extenuación por prolongar su racha de victorias, hasta siete consecutivas, pero que truncó la misma en su visita a Martiricos.
La calidad de Dani Pacheco y el doble pivote de N’Diaye junto a Adrián arruinaron las intenciones gaditanas de construcción de su fútbol en el centro del campo. Blanco Leschuk fijaba a sus centrales mientras un inteligente Harper filtraba un esférico que Fede Ricca enviaba al fondo de las mallas amarillas. Antes Javi Ontiveros fue capaz de revolucionar una vez más la coctelera en el segundo periodo para que llegase el triunfo. La realidad de una noche fría y con demasiado cemento en las gradas, viernes y frío mala combinación para ver fútbol señor Tebas, es que ganó quien más lo intentó.
Reflexión para los de Muñiz, que cuando quieren pueden ganar incluso a rivales directos pero dejándose el alma sobre el terreno de juego, sino es imposible. Los blanquiazules se acostaron líderes lo que les permite ver el resto de la jornada más tranquilos y, de paso, recuperar el pulso pedido antes de la visita a Son Moix siete días atrás.
¡Memoria, Compromiso y Fe!, sobre todo ésto último.