Ha sido una mañana mágica la que se ha vivido en el estadio de La Rosaleda. Primero, sembrar para recoger con los más peques de la casa, una brillante e interesante iniciativa. Posteriormente, con un respetuoso y sepulcral minuto de silencio en memoria de uno de los grandes del malaguismo con todas las letras, Don Juan Cortés. Finalmente, porque al Málaga de Javi Gracia le ha salido todo redondo desde el primer minuto.
El primer gol de un extraordinario Samu fue el principio del fin para un Rayo Vallecano que ya podía ir perdiendo en ese minuto por 3-0. Tras el gol, los blanquiazules, liderados por Sergi Darder y Amrabat, junto a un espectacular Samu Castillejo. dominaron a placer a un desdibujadísimo equipo de Paco Jémez. Puestas así las cosas, otro desajuste en la zaga rayista provocó el segundo gol en las botas de Sergi Darder tras el pase de la muerte de Antunes. Juanmi, con una calidad sublime para jugar entre líneas, hizo el tercero dándole al esférico un toque de elegancia y solemnidad.
Por último, y dedicado al cielo en la Tribuna Celestial de Juan Cortés, un penalti al inicio de la segunda mitad propició el cuarto y definitivo tanto. Ni el amable profesor hubiese imaginado un encuentro tan apacible. Ayúdanos, Juan, desde ahí arriba a seguir viendo al Málaga de nuestros amores en la zona noble de la clasificación. Un abrazo, profesor.