Ya no recuerdo la última vez que el Málaga CF presionaba al rival en campo del adversario adelantando sus líneas en campo contrario. Tampoco recuerdo ya cuando este grupo de futbolistas fue capaz de aguantar un nivel de intensidad tan alto durante un partido completo. Hay que felicitar a Víctor Sánchez del Amo porque en cuatro días le ha cambiado la cara al equipo y su sistema táctico.
Ha liberado a los jugadores mentalmente y planteó una línea de cuatro con un pivote por delante y los demás miembros del equipo casi en campo contrario todo el envite. A ello se unió también un Alcorcón, con los deberes hechos de cara a la permanencia tras el resultado obtenido en La Romareda y sabedor de que la próxima jornada sumará los tres puntos del Reus.
Tal y como jugaron algunos futbolistas ayer es evidente que muchos de ellos le han hecho la cama a Juan Ramón López Muñiz. Hay cosas lógicas que puede conseguir un entrenador tácticamente, sin embargo hay otras que no están en su mano. La capacidad física demostrada frente al rival y el nivel de intensidad de algunos les ha delatado muy claramente.
Eso no es obvio para destacar, una jornada más, el partidazo de Ontiveros. Además de los goles, a cuál más bonito, realizó un encuentro muy completo en ataque sin desmerecer su trabajo en defensa en ningún momento. Sumo a ese nivel futbolístico el demostrado ayer por Adrian y el desgaste de N’Diaye, cuyo rendimiento había bajado muchísimo.
El mister dio ayer más libertad a los extremos, golazo de Renato, por cierto, lo que permitió que más jugadores se incorporasen a la zona de remate. En definitiva bien debut de Víctor Sánchez del Amo, ahora precisa 17 puntos más para el ascenso directo u 11 puntos para jugar el play off para ese objetivo. Viernes Santo de Resurrección para el Málaga CF, aunque sea uña herejía que Javier Tebas colocase este encuentro a los malaguistas en un día tan señalado para todos ellos en la Semana Santa. El fútbol, como siempre es de los jugadores y de su vergüenza torera.
¡Memoria, Compromiso y Fe!, sobre todo esto último.
