El titulo de la obra magna de García Márquez: “Cien años de Soledad”, nos serviría para definir la sensación de los malaguistas dentro de las áreas frente al Mirandés.
Chavarría, en dos ocasiones una de ellas a la limón con Jozabed, no tuvo fortuna cara al gol y además terminó lesionado.
Rahmani, una vez más lo bordó, sin embargo también erró en dos buenas oportunidades para haber puesto al Málaga CF en franquicia en el marcador.
Sin embargo los blanquiazules fueron incapaces de materializar las ocasiones, y como suele suceder en estos casos terminaron, perdiendo el encuentro.
Porque el fútbol, querámoslo o no, es ésto.
Sin goles no hay paraíso, y si le añadimos que los costasoleños demostraron en Anduva que defender los centros laterales a balón parado les supone un dolor de muelas, pues tenemos el resultado a la ecuación perfecta.
Así Vivían marcó el único tanto del envite, pues Escassi rompió el fuera de juego.
Una vez más quedó claro que la ausencia de Ismael Casas castiga mucho a los de Pellicer y que Orlando Sa, lejos de aportar nada al equipo, acaba siendo jugar con uno menos los minutos de juego que está sobre el terreno de juego.
Siguen siendo cinco victorias las que faltan para lograr la permanencia y, por lo tanto, no debería ser un imposible conseguirlo.
Jugando como en Miranda de Ebro aún menos, sin embargo hay que tener mucho más acierto en la suerte suprema, al tiempo que aprender a defender los centros laterales del rival.
Respecto a la rueda de prensa del administrador judicial, José María Muñoz, lo que digo siempre, que finalice su trabajo y facilite la ampliación de capital para que lleguen los nuevos propietarios del club y la sociedad anónima deportiva malaguista.
Cada día que pasa en su cargo es una rémora para el futuro de la entidad malacitana.
Estaría bien que no le tomase el pelo a los periodistas en las rueda de prensa con tecnicismos societariamente que desconocen y que cuando hable de traiciones, de nombres y apellidos.
Porque a día de hoy la única traición conocida desde que el administrador llegó al club, ha sido filtrar información sensible a los medios de comunicación, teóricamente afines, que perjudicaban al Málaga CF y a su futuro inmediato,
¡Memoria, Compromiso y Fe!, sobre todo ésto último.