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Y LA ACADEMIA DEL MÁLAGA, ¿DÓNDE ESTÁ?

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Arraijanal continúa sin ver construir la Academia del Málaga C.F.

@SuarezRMarca | El pasado 22 de mayo se presentó la aprobación definitiva del Plan Especial de Arraijanal para construir la Academia del Málaga club de fútbol. Así se anunció a bombo y platillo en la Delegación del Gobierno andaluz con la presencia del delegado, José Luis Ruiz Espejo; del entonces consejero de Deportes, Luciano Alonso; y del Director General del club blanquiazul, Vicente Casado.

 

En aquel acto se dijo que durante el mes de junio se publicaría ese Plan en el BOJA, algo que no ocurrió hasta el pasado 6 de agosto, con dos meses de retraso. También aseguró Casado que se comenzaría a trabajar “cuanto antes, incluso este mismo verano” para que en la época estival de 2016 “ya esté lista la primera fase, que incluye 3 campos de fútbol para la cantera, con vestuarios y una cafetería”. Esa primera actuación tiene un presupuesto de 5 millones de euros, 4 que saldrían de la venta de la Ciudad Deportiva de El Viso y 1 que el Málaga tendría que aportar.

 

 

Sin embargo, desde entonces nada se ha hecho en Arraijanal. Es más, el pasado 25 de junio, en aquella extensa rueda de prensa que concedió Casado para, entre otras cosas, justificar la venta de los canteranos, explicar los planes de Al Thani y presentar una reestructuración interna con González de Lara y Daniel Pastor como hombres clave en la Fundación y en un Comité Económico, respectivamente -que tampoco se ha hecho realidad-, también aseguró el Director General que “creo que podremos empezar las obras en septiembre. Tenemos prácticamente cerrada ya la venta de El Viso, entre 4 y 5 millones, que se va a destinar a la construcción de la Academia”.

 

Pues estamos ya justo a mitad de noviembre y nada se sabe del inicio de las obras de la Ciudad Deportiva, como tampoco de la venta de El Viso, ni a través del club ni a través del Ayuntamiento, que estaba actuando como mediador en esta operación. Y sin el dinero de esos terrenos, es imposible empezar a construir. El sueño de la Academia continúa siendo eterno.

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