@JuanjeFernandez || La gira LFP World Challenge ha proporcionado muchos problemas al equipo malaguista. Los de Martiricos han tenido que recorrer más de 25.000 kilómetros en apenas siete días, 4 vuelos, tres cambios horarios y algunos contratiempos que no estaban previstos. Sin ir más lejos, los blanquiazules tardaron el doble de lo previsto en viajar de Cali a Buenos Aires. Además, una vez en la capital argentina, los de Martiricos no pudieron entrenarse con normalidad en la previa del partido ante San Lorenzo al no disponer de campos de entrenamiento y tuvieron que realizar los ejercicios de estiramientos en la recepción del hotel de concentración. Estos son solo algunos de los detalles de una gira sudamericana que como dijo Duda en redes sociales dio “para escribir un libro”.
Pero si hay algo en lo que ha cumplido la gira organizada por La Liga ha sido en el nivel competitivo de los rivales malaguistas. Unos rivales que se emplearon con dureza y que obligaron a correr y a sudar a los futbolistas del técnico navarro. Ante Deportivo Cali, los boquerones vieron cinco cartulinas amarillas: Weligton, Juanpi, Charles, Kameni y Espinho, el portugués bien pudo ser expulsado, aunque también lo pudo ser Murillo que repartió de lo lindo durante todo el encuentro. Los colombianos cometieron 20 faltas y los malaguistas 25, señal de la competitividad del partido que acabó con 3-2 en el marcador.
Ante San Lorenzo el nivel de dureza alcanzó cota mayor. Los malaguistas recibieron 21 faltas y cometieron 19, siendo amonestado por los blanquiazules Recio, Espinho, Duda y Pablo Fornals. El partido tuvo historia con el árbitro que mandó a repetir incluso un penalty de la tanda final y amonestó verbalmente a Pol Ballesté. Lo increible fue ver como algunos jugadores de los ‘cuervos’ se fueron de rositas del partido.
Ayer, frente a CA Peñarol, ambos equipos acabaron jugando con diez futbolistas. Carlos Pastorino, árbitro de la contienda, amonestó a Weligton, Rosales y Duda por parte malaguista. Además expulsó por roja directa a Recio y por doble amarilla a Palacios. El partido fue intenso y duro, los malaguistas hicieron 22 faltas por 24 de los uruguayos en un encuentro que sirvió para cerrar el tortuoso camino de los malaguistas por Sudámerica.
