@SuarezRMarca | Echar de menos a Luis Hernández y más en una temporada en la que ha jugado todos los minutos posibles de la liga, es normal. Destacar que el equipo pierde un pilar fundamental de esa defensa que ha sido la clave para que los de Muñiz continúen en posiciones de ascenso después de haber estado once jornadas como líderes es también de perogrullo.
La lesión del central, sin embargo, es más preocupante aún si uno mira la estrategia utilizada por Muñiz en los saques de banda. No hay ni uno solo desde la zona de tres cuartos en adelante en la que no aparezcan los brazos de Luis para colocar el balón en el corazón del área.
La denominada catapulta infernal se ha mostrado como un arma extraordinaria para el Málaga de cara a desatascar partidos y a perforar la meta contraria. No hay nadie en la plantilla con esa fuerza y calidad para impulsar el balón como lo hace Luis Hernández desde el lateral, por lo que los boquerones notarán también en la ofensiva su baja durante varias semanas.
