@Carloshernando_ | Ontiveros fue el hombre de un partido sin importancia para ambas escuadras, que sirvió para reafirmar el buen estado del equipo boquerón. El marbellí anotó otro de los golazos de la casa en una primera parte dominada por los de Míchel; Recio y Sandro se sumarían al canterano y firmarían una de las mejores noches para el malaguismo, que ve a su equipo con 45 puntos a falta de dos jornadas
Partido de trámite en los primeros minutos en La Rosaleda con dos equipos que ya han competido, con sus más y sus menos, en la competición local. Unos ya piensan en el año que viene, pero motivados con la racha de tres victorias consecutivas; los vigueses, en cambio, lastrados por tres derrotas salieron presionados por los jugadores de Míchel, intimidando a Sergio Álvarez con los tres intentos de Sandro.
Aunque el canario compraba todas las papeletas para sumar otro tanto (luego las canjearía), fue el canterano Ontiveros el que abrió la lata con un zurdazo imparable desde la frontal del área. El marbellí no encontró resistencia alguna por parte del Celta, anotando otro golazo como él solo sabe hacer y siendo omnipresente en todo momento. El Celta se desmelenó en los minutos posteriores, aunque una cesión crítica de Lemos casi significa el segundo gol si no llega a ser por Sergio Álvarez, el mejor de los de Berizzo y que evitó una sangría de goles al descanso.
En la segunda parte se pudo ver a un Celta más activo en la busca del gol, contando incluso con un tiro a la madera de Marcelo Díaz tras un buen lanzamiento de falta. Minutos más tarde, en el 56, Ontiveros volvió a enfundarse el traje de mago para asistir a Sandro en dos ocasiones. En la primera de ellas, el canario hizo negocio con el penalti que le birló a Cabral y que transformó Recio; en la segunda, su disparo cruzado se fue desviado lamiendo el palo.
La polémica llegó en la expulsión de Berizzo tras un choque con Recio. El entrenador de los vigueses acusó al paleño de un pisotón y el partido se calentó por un momento, acompañado de un reparto de amarillas de la mano de Del Cerro Grande, “premiando” a Recio y Guidetti, que estaba en el banquillo, con amarillas y mandando a los vestuarios a Berizzo.
Volviendo al fútbol, Keko intentó lucirse con una vaselina pero el ensayo culminó en ridículo. El irrisorio partido del Celta se agravó con el gol de Sandro tras una jugada de tiralíneas del Málaga donde Keko filtró el balón para Juankar y este regaló al canario para que empujase el balón y consagrar la cuarta victoria consecutiva del equipo en esta temporada.
Málaga: Kameni; Ricca, Luis Hernández, Llorente, Miguel Torres; Recio, Camacho; Jony (Juankar, 73´), Fornals (Chory, 88´), Ontiveros (Keko, 84´); Sandro.
Celta de Vigo: Sergio Álvarez; Lemos, Cabral (Roncaglia, 59´), Gómez, Planas; Pape Cheikh, Díaz; Señé (Hjulsager, 70´)), Jozabed, Bongonda; Beauvue.
Goles:
Ontiveros, min 25: El canterano condujo desde la derecha hasta la frontal del área y batió a Sergio con un zurdazo impecable.
Recio, min 56: Penalti anotado por el paleño y cometido por Cabral a Sandro.
Sandro, min 90: Jugada de tiralíneas: Keko en profundidad para Juankar, que asiste a Sandro para que la empuje.
