@Danielnz97 || La ambición de Jack Harper le hizo abandonar el Málaga. Recién estrenado el 2019, el conjunto de Martiricos tenía todas las papeletas para ascender a Primera División; el Getafe, mientras, se codeaba con el cuarto puesto y contaba con opciones reales de ser equipo de Champions League la próxima temporada. Fue entonces cuando el fuengiroleño de origen escocés acordó su llegada a la capital. Desde entonces, su protegonismo en la ciudad del sur descendió radicalmente hasta el punto de quedar casi en el olvido. Hasta que Víctor lo rescató para jugar contra el Elche y, posteriormente, frente al Deportivo de la Coruña.
"Desde el principio de la pasada temporada tenía claro mi destino, el Getafe es un gran club. Vengo a aprender, a coger experiencia y tengo muchas ganas de empezar. A principios de temporada me llamó Bordalás y desde entonces sentí el interés. También me llamó a final del curso. El objetivo es llegar a ser un referente aquí. En cinco años tengo tiempo para asentarme y para hacerme un nombre, quiero hacer cosas bonitas. Me siento cómodo en el campo. He jugado en banda, como único punta, como segundo delantero… Jugaré donde el míster lo vea conveniente", dijo en su presentación con el Getafe el 9 de julio.
Los azulones, que pagaron un millón y medio de euros por el delantero, se tuvieron que conformar con la quinta plaza y, en consecuencia, con la Europa League. Harper, que llegó con la idea de formar parte del equipo madrileño, con el que debutaría en Primera División y en la segunda competición continental, sí que se quedará en el epicentro del país, pero se tendrá que conformar de nuevo con la categoría de plata del fútbol español. O, dicho de otra forma, de la Liga 1|2|3… a la Liga SmartBank. Es decir, lo mismo.
Y es que Jack Harper ya es nuevo jugador del Alcorcón. Así, el atacante recala en el conjunto alfarero por una temporada sin opción de compra. Tendrá que demostrar este curso que tiene nivel para jugar en la Liga Santander. De esta forma, el ariete volverá a pisar, si nada ocurre (lesión, sanción, decisión técnica…), La Rosaleda para medirse a sus antiguos compañeros.
