@SuarezRMarca | La incorporación de Diego Rolan permite respirar a Míchel, quien por fin tendrá una alternativa válida para cambiar el sistema ofensivo del equipo. Hasta el momento, sólo ha podido jugar con Borja Bastón, el único delantero en el que realmente confía, pues En-Nesyri no ha mostrado el potencial que se esperaba de él hace ahora un año. El marroquí, que incluso se ha caído de la selección absoluta para volver a la sub-20, ha salido desde el banquillo en los dos partidos de Liga, pero no ha servido de revulsivo. A Peñaranda, ahora lesionado, ni está ni se le espera.
Ahora, con el delantero uruguayo, Míchel gana un activo para el ataque, alguien que le ofrece variantes para volver, por ejemplo, al sistema de dos delanteros con el que empezó en su etapa blanquiazul. Rolan no es un 9 al uso, pero sí tiene cualidades como para actuar en ese rol ante determinadas defensas. Pero donde más destaca es como acompañante del ariete, que se puede aprovechar de su movilidad y empuje. Además, en caso de tener que modificar el sistema durante un partido, Rolan también podría caer a banda, en especial a la derecha, que es donde suele encontrar hueco en la selección uruguaya.
Sin ser un futbolista muy veloz ni habilidoso, su potencia sí le permite romper las defensas y llegar con cierta comodidad al área. Tampoco es un goleador de 20 tantos por temporada, si bien sí suele anotar una media de un gol cada cuatro partidos. Su mejor campaña fue la 14/15, en la que anotó 15 goles en Liga en 36 encuentros. En las dos últimas ha anotado 7 y 8 en en 31 y 26 partidos, respectivamente.
Ahora, como ha declarado en su presentación, Rolan está dispuesto "a marcar todos los goles posibles". Un reto que Míchel quiere y necesita que cumpla para que el Málaga vuelva a ser un conjunto que cree ocasiones y que gane partidos.
