@JuanjeFernandez || La hora de la verdad ha llegado para un Málaga que mañana afrontará uno de los encuentros más importantes de la temporada. La sensación no la tienen solo los jugadores y aficionados sino que fue el propio Míchel quien lo señaló en rueda de prensa en la previa del duelo ante los de Quique Sánchez Flores. "El partido de mañana es tremendamente importante para reengancharnos a una zona donde hay que llegar como sea y es a través del triunfo. Después de perder contra el Alavés nuestra situación era complicadísima y así seguimos. Nada más que tenemos la referencia del partido de mañana para conseguir lo que perseguimos, que es tener algo de estabilidad", remarcó ante los medios.
El preparador malaguista sigue confiando en sus pupilos a los que todavía ve lo suficiente animados como para revertir la situación. "Los jugadores, más allá de la tristeza y los malos resultados que vivimos y viviremos, no cejan en su empeño y por supuesto entrenan al máximo dentro de nuestras cualidades, igual que el entrenador. A lo mejor no sabemos hacer más, pero yo lo intento con todo lo que puedo y los últimos entrenamientos han sido realmente buenos", explicó.
Míchel quiso restar importancia a lo que ocurrió en el Ciudad de Málaga el pasado 28 de diciembre. Hay que recordar que un centenar de aficionados se dieron cita en los aledaños del estadio para protestar contra directiva, jugadores y el propio técnico. "Realmente los medios le disteis más importancia porque estuvisteis más que en cualquier otro entrenamiento. Os dejasteis llevar por el sentimiento de la afición, porque estamos contrariados", afirmó el preparador. El madrileño quiso señalar que la mayoría eran menores de edad: "Con todos mis respetos y ojalá se entienda lo que quiero decir, pero el 80% de los que había eran menores de edad y los demás tienen sus opiniones. Me paré a hablar, pero también es cierto que no tenían intención de escuchar. Más allá de eso tienen sus razones respetables seas menor o mayor. Algunos la pierden insultando, pero eso no lo vamos a cambiar en este mundo del fútbol, y más allá de eso les di mis razones".
El técnico malacitano sí está algo molesto con los que dudan de la capacidad de trabajo de los suyos. "Puedo permitir que cuestionen nuestra capacidad, pero no puedo admitir que se cuestione de forma personal una falta de actitud. Hacemos lo que podemos y con eso no nos alcanza, pero trabajamos duro toda la semana. Uno de los argumentos era que entrenábamos poco porque lo ponían en Twitter, eso me parece poco razonamiento con todos mis respetos".
Míchel analizó los peligros de su rival de mañana. “Es un buen bloque, con un equipo muy al estilo de su entrenador y con jugadores de gran calidad como Sergio, gran definición como Gerard Moreno o velocidad con Leo Baptistao y Piatti. Es extraño que estén abajo en la tabla”, sentenció. El preparador malaguista sigue confiando en sus pupilos a los que todavía ve lo suficiente animados como para revertir la situación. "Los jugadores, más allá de la tristeza y los malos resultados que vivimos y viviremos, no cejan en su empeño y por supuesto entrenan al máximo dentro de nuestras cualidades, igual que el entrenador. A lo mejor no sabemos hacer más, pero yo lo intento con todo lo que puedo y los últimos entrenamientos han sido realmente buenos", finalizó.
