@JuanjeFernandez || La victoria del Málaga en Alicante ante el Elche ha servido para que los malaguistas abran un surco de diez puntos con el octavo puesto y el grupo de perseguidores que acechan las posiciones europeas que ahora mismo rondan los de Javi Gracia. Un grupo formado por el Celta, que acumula cinco derrotas consecutivas sin hacer gol, el Eibar, la otra revelación de la liga y un Espanyol acostumbrado a mirar más hacia abajo. El discurso de los malaguistas está claro, hay que seguir mirando hacia abajo y por eso también hay que destacar que los blanquiazules también han conseguido abrir un hueco de diecisiete puntos.
De los siete de arriba el Málaga ocupa la última plaza, pero el buen hacer de los de Javi Gracia ha situado la Champions a tan solo un pasito. Un buen hacer que se ha transformado en puntos gracias a la máxima rentabilidad que los blanquiazules están sacando a sus goles en este inicio liguero. Lo que empezó siendo un defecto, los malaguistas no anotaron un gol de jugada hasta la jornada siete de Liga ante el Granada, se ha convertido en una de las principales virtudes de un equipo que exprime cada gol conseguido.
Treinta puntos para veinte goles, nadie de los de arriba ha conseguido rentabilizar tanto los goles que hace el equipo como los malaguistas. De las nueve victorias conseguidas por los de Martiricos, ocho se han conseguido con un gol de diferencia, estando estas repartidas en cuatro 1-0 y otros cuatro 2-1. Tan solo ante el Rayo Vallecano el equipo de Javi Gracia ha hecho más de dos tantos en un partido. Y es que cada gol anotado por los blanquiazules ha servido para conseguir un punto y medio, una cifra con la que Europa y la Champions no es pensar en una utopía para este año 2015 que entra.
