@JuanjeFernandez || Fiesta en La Rosaleda que abrió y cerró el partido de la jornada 42 con el himno tronando a camela. Boulahroud, Ricca e Hicham solventaron por la vía rápida un partido que no era trámite pese a las nueve novedades en el once de Víctor. El Málaga volvió a completar un partido de sobresaliente ante un Elche que no hizo mucho por conseguir los tres puntos.
El partido arrancó con dos acontecimientos casi simultáneos. David Lombán caía lesionado después de la primera jugada de ataque, que acabaría en córner, de los de La Rosaleda. El de Avilés se marchaba cojeando visiblemente entre los dos banquillos justo en el mismo momento en el que Boulahroud aprovechaba el saque esquina para enganchar una volea que se colaba en la portería de José Juan después de golpear en el palo derecho. Un tanto que daba tranquilidad a los blanquiazules nada más comenzar el partido. Lacen ocupaba su lugar en el terreno de juego.
Tras el tanto inicial, ambos equipos se repartieron las ocasiones en cada lado del campo. Kieszek tenía que sacar una mano salvadora a una falta de Nino que buscaba la escuadra. La respuesta malaguista no se hizo esperar, tras un lío entre Pacheco e Hicham la pelota le caía a Ricca dentro del área pero el uruguayo enviaba la bola por encima del larguero del meta franjiverde. Dos minutos después, cuando se rozaba el veinte de choque, llegó un nuevo disparo de Harper tras otra buena jugada de Boulahroud por la banda derecha.
Los minutos pasaban sin que ocurriese mucho. El Málaga buscaba tener al Elche lejos de los dominios de Kieszek y lo conseguía a base de paciencia y posesión. Luis Hernández y Diego González se comían a Nino en los balones directos que proponían los ilicitanos y se llegaba al descanso sin mucho que contar en el cuarto de hora final del primer acto. La Rosaleda se relajaba y miraba a otros campos para saber su rival del miércoles.
El segundo tiempo comenzó sin cambios en uno y otro equipo. La primera aproximación blanquiazul en el segundo tiempo llegó de nuevo en un saque de esquina con un cabezazo de Ricca que se fue por encima del larguero ilicitano. El Elche lo intentaba sin mucha suerte. Pacheta daba entrada al campo a Gonzalo Villar con la intención de buscar un empate que no estaba en la cabeza de ninguno de los presentes.
El cabezazo de Ricca iba a ser premonitorio. El charrúa firmaría el segundo tanto del partido, su cuarto en Liga, con un testarazo de mucho nivel a centro medido de Renato Santos. Minutos antes se había celebrado el gol del Almería que prácticamente dejaba sentenciada la tercera posición. El Málaga se liberó y comenzó a atacar con mucha libertad. Cinco minutos después del 2-0, llegó el tercero obra de Hicham. De nuevo Renato iba a protagonizar una gran jugada que acabaría con la asistencia de Pacheco al canterano marroquí. La Rosaleda cantaba “que sí, j…r, que vamos a ascender”.
En el último cuarto de hora no ocurrió mucho. La Rosaleda se dedicó a disfrutar de la victoria y a pensar en el duelo del miércoles ante el Deportivo de la Coruña. La fiesta solo se interrumpió para los pitos que se llevó Miguel Torres en el que fue su debut en esta campaña 18-19. Víctor aprovechó para proteger a Ricca y a Hicham. El 3-0 final sirve para que los malacitanos lleguen en la cresta de la ola y habiendo firmado un quince de quince en las últimas cinco jornadas de LaLiga 1 2 3.
